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Presunto homicida de Dayana siempre mostró comportamiento ejemplar
Amigos y conocidos del imputado se dicen sorprendidos de las acusaciones en contra del expolicía navolatense.
Culiacán, Sin.- Miguel Eduardo Burgos Varela, expolicía sospechoso de asesinar a la niña Dayana, siempre tuvo un comportamiento ejemplar y actitud amigable hacía las personas, así lo expresan quienes lo conocieron y constataron con asombro la publicación de su fotografía en redes sociales.
Luz Noticias contactó una fuente confiable quien dijo conocer desde hace años al señalado sin que en ningún momento diera muestra de un comportamiento agresivo o sospechoso.
Miguel Eduardo era padrino de una hermana de la testigo en mención, por lo que llegaba a la casa de su familia y en ocasiones convivía durante horas, entre bromas, risas y consejos positivos.
De los mejores amigos de su padre, nunca se imaginó que aquel hombre estuviera relacionado con el caso que sembró terror en San Pedro, Navolato y generó indignación en todo Sinaloa.
“Sí lo conozco, el señor era bueno, él iba para mi casa muy seguido, a desayunar, comer, cenar, nunca nos faltó el respeto ni a mis hermanas ni a mí, me sorprende mucho que digan eso porque era una persona buena, amable, todo el tiempo daba los buenos días, las buenas tardes, ¿cómo están?, siempre muy amable”, expresó la testigo.
--¿Nunca hubo alguna indirecta hacía ustedes?
“No, jamás, nunca, todo el tiempo amable, nos llegaba regalos pero nunca con mala intención. Él era muy amigo de la familia. Yo cuando miré la fotografía me quedé sorprendida, nunca me imaginé que él fuera el asesino de la niña. Da coraje y da tristeza”.
--¿Te dio algún consejo?
“El todo el tiempo nos decía “échenle ganas a la escuela plebes, no dejen de estudiar”.
La testigo confirmó que Miguel Eduardo tenía su domicilio en Juan Aldama, "El Tigre", perteneciente a Navolato y durante muchos años estuvo asignado a la sindicatura de Villa Juárez, pero un par de meses atrás de su desaparición fue cambiado a la cabecera municipal de Navolato.
En 2009 Miguel Eduardo Burgos Varela, quien era considerado esposo y padre ejemplar de tres hijos fue reconocido como “Gente de Bien” por el Club Rotario de Navolato.
Entrevistado en aquel momento por el periodista Martín González expresaba:
“Hay que dar lo mejor de uno a la ciudadanía. Eso es lo más importante para que lo valoren y sepan que sigue habiendo gente que piensa en las personas. Hay que hacer nuestro trabajo como debe ser, nunca sobrepasarse ni abusar", decía en una entrevista publicada en Noroeste.
El buen antecedente ha provocado una serie de rumores en las redes sociales y hasta la sospecha de que este elemento pudiera estar siendo utilizado como “chivo” expiatorio en un contexto electoral.
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