Agro mexicano perderá competitividad con aranceles de Trump

Ciudad de México.- De aplicarse aranceles a los productos agropecuarios que ingresan a Estados Unidos, los productores mexicanos perderían competitividad y mercado ante países como Chile y Perú, aseguró Juan Carlos Anaya, director de Grupo Consultor de Mercados Agrarios (GCMA).

Dijo a Notimex que un impuesto inicial de 5.0 por ciento traería una afectación diaria de 3.5 millones de dólares, pero ésta podría ascender hasta 18 millones de dólares de tener un arancel de 25 por ciento.

Si bien ese impuesto repercutirá más en los importadores y consumidores del otro lado de la frontera, ese mercado buscará la manera de cobrarlo a los exportadores mexicanos u otras alternativas para adquirir los productos agroalimentarios.

En el caso del aguacate, cuya industria mexicana mandó 121 mil 908 toneladas para la pasada edición del Super Bowl, los estadounidenses podrían recurrir a Perú a pesar de carecer del volumen, calidad y sabor necesario para abastecer el consumo, advirtió.

Pero la preocupación es menor porque hay productos como el tequila que, sin duda, no tienen quién se los haga llegar a los estadounidenses, comentó Anaya, quien consideró que a ninguno de los países le conviene empezar una guerra comercial.

Ese posible escenario pondría a México en posición más desfavorable, toda vez que tiene una balanza superavitaria con el país vecino, sostuvo minutos antes de que la comitiva mexicana, encabezada por el canciller Marcelo Ebrard, se reuniera con el vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence para buscar un acuerdo.

Se estima que el valor de las exportaciones agroalimentarias mexicanas fue de 34.8 mil millones de dólares durante 2018 y, de ellos, 26.9 mil millones -77.3 por ciento— se envió a territorio estadounidense.

La cerveza, tequila, aguacate, tomates, berries, bovino en pie, azúcar y cítricos fueron los productos mayor exportación, según datos de esa empresa consultora en dicha industria.

Mientras que las importaciones de México fueron del orden de 32.1 mil millones de dólares, de las cuales 66.8 por ciento provino de Estados Unidos.

México representa 12.6 por ciento del mercado agroalimentario de Estados Unidos, sin embargo, para nuestro país significa el 66.8 por ciento del abasto total. Entre los productos agroalimentarios de mayor importación se encuentran el maíz, soya, trigo, pasta de soya, arroz, carne de cerdo, pollo y leche, entre otros.

“La realidad es que en esta guerra (comercial) nadie gana”, enfatizó Anaya, quien reiteró que los asuntos migratorios no deben contaminar y perjudicar la estrecha relación comercial que existe entre ambos países.

Es situación, sentenció, tiene un sentido más político que comercial y económico de cara a las elecciones de Estados Unidos, pero “tener una disputa ahora, cuando su país se encuentra en un estado crítico con China, sería un duro golpe para su economía”.

Pero de insistir, el gobierno mexicano debe poner clara su posición e imponer medidas espejo como ocurrió con los aranceles a las importaciones de acero y aluminio hace un año, cuando se negociaba la modernización del nuevo acuerdo de Norteamérica, remarcó.

Empero, según un análisis de la consultora, si se opta por esa medida se “tendrían efectos inflacionarios en la economía nacional porque los productos se adquirirían a un más alto precio”, incluso si se compran de otros países como Sudamérica.

Anaya reiteró que México está en desventaja, pues tiene muy alta dependencia del mercado de Estados Unidos y no cuenta con una tesorería similar a la norteamericana que le permitiera compensar las pérdidas a los productores nacionales.

Reconoció la reacción rápida y oportuna de parte del gobierno federal y congruente al promover una negociación para el tema migratorio, antes de escalar el problema al terreno comercial, pero exhortó a ser firmes en la negociación.

Este miércoles, en la conferencia de prensa de la delegación mexicana desde Washington, el canciller Marcelo Ebrard dio a conocer que mañana continuarán las negociaciones para acercar posiciones tanto del gobierno de México como de Estados Unidos.

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