Se cumplen 4 años de la captura de "El Chapo" en Los Mochis

Los Mochis, Sin.- Cuatro años han pasado desde aquella madrugada donde, con apoyo de adelantos tecnológicos, pero también por las debilidades y gustos del narcotraficante, Inteligencia detectó la ubicación del jefe de seguridad de “El Chapo”, Orso "El Cholo" Iván Gastélum, lo cual llevó al grupo de élite de la Secretaría de Marina a realizar el famoso operativo "Cisne Negro".

Tal operativo arrojó también la detención del narcotraficante más buscado en los últimos tiempos, Joaquín “El Chapo" Guzmán Loera, el 8 de enero del 2016.

La captura se registró luego de decenas de pistas y operativos fallidos para su detención, y a pesar de la supuesta protección por parte de autoridades policíacas y políticas de México, pero sobre todo del miedo de quien pudiera saber dónde se refugiaba, a quien se le considera el líder del Cartel de Sinaloa.

Incluso, hoy se sabe que días antes, el 6 de octubre del 2015, un grupo especial de la Secretaría de Marina, integrado por 30 marinos, en tres helicópteros, lo sorprendieron en una casa ubicada en la comunidad de Piedrosa, municipio de Cosalá, Sinaloa, muy cerca de los límites con Durango, de donde logró escapar y escabullirse entre las montañas; ahí, supuestamente, tiempo antes, fue el encuentro con la actriz y productora Kate del Castillo y el actor estadounidense Sean Penn, donde lo entrevistaron, según dieron a conocer las autoridades posteriormente.

Un par de meses después, Inteligencia reportó pistas de que un jefe del narco de alto nivel se refugiaba en Los Mochis y otro más llegaría al encuentro; sin embargo, pese a que el territorio era considerado en poder Fausto Isidro Meza Flores, alias “El Chapo Isidro”, declarado enemigo de Guzmán Loera, la situación alertó a las autoridades mexicanas.

También, hoy se sabe que inteligencia abría interceptado llamadas, en las que referían que “la abuela” visitaría Los Mochis... Sabían que era una persona importante dentro del narco en Sinaloa, pero hasta ese momento desconocían de quién se trataba. Otra de las pistas que llevaron a la captura, además del encuentro con los actores, fue la supuesta orden de comida china que había realizado uno de sus escoltas, así como la supuesta compra de tacos en el mismo sector.

Luego de analizar las llamadas y trabajo de inteligencia, definieron que quien se refugiaba en la casa ubicada en el cruce del bulevar Jiquilpan y la calle Río Quelite, del fraccionamiento Las Palmas, en Los Mochis, era Orso Iván Gastélum Cruz, alias "El Cholo" Iván, jefe de seguridad y mano derecha de Joaquín Guzmán Loera, y quien en ese momento formaba parte de los 122 objetivos prioritarios del Gobierno Federal. 

Incluso, a este personaje se le atribuye su participación en el escape de "El Chapo" del penal de máxima seguridad del Altiplano, el 11 de julio de 2015.

Y así, 181 días después de la penúltima fuga, “El Chapo” se mantuvo escondido, se dijo que en la sierra de Durango, en Badiraguato, u otros sitios del llamado Triángulo Dorado, conocido por el cultivo y trasiego de drogas. 

Pero el día había llegado, el Centro de Investigación en Seguridad Nacional (CISEN) y la Unidad de Inteligencia Naval de la Secretaría de Marina en México, junto a las instancias de inteligencias de Estados Unidos: la Agencia Central de Inteligencia (CIA), la Agencia Antidrogas (DEA), entre otras, conjuntaron todas las líneas de investigación y definieron llevar a cabo el operativo “Cisne Negro”, en el cual detuvieron a “El Chapo” y “El Cholo" Iván.

Han transcurrido cuatro años y la casa donde se refugió por última vez “El Chapo” continúa bajo custodia de la Fiscalía General de la República, y se supone que resguarda por elementos de la Policía Municipal de Ahome, luego que fue vandalizada en dos ocasiones, pero los agentes, la mayor parte del tiempo, no están en la vivienda.

Hoy, algunos vecinos recuerdan la balacera como una anécdota para sus familiares, pues aunque el sitio es un punto a visitar, hoy se atreven a contar supuestos movimientos extraños de personas que llegaban y salían durante las noches, y es que días recientes a la captura nadie decía nada, y todos aseguraban no haber detectado nada fuera de lo normal en la casa de Guzmán Loera.

Quienes viven a los alrededores de la casa narran que ya se acostumbraron a qué personas lleguen, observen, ronden y se tomen fotografías desde afuera del domicilio; sin embargo, lo que aún se preguntan es en qué momento hicieron el túnel, sin que ellos mismos se percataran del ruido, pues a simple vista se trataba de una remodelación de la casa.

Cuentan también que esa madrugada sintieron que perderían la vida, quizá de una bala perdida y hoy, con el transcurrir del tiempo, aseguran que, pese al operativo que llevó a la detención del poderoso narcotraficante, todo pareciera ser en vano, pues según sus opiniones, el imperio del Cartel de Sinaloa prácticamente sigue intacto, aún estando preso Joaquín Guzmán Loera.

Cuestionados sobre el enfrentamiento entre la guardia personal de “El Chapo” y el grupo de Élite de la Semar, mismo que después se dio a conocer a través de un video, dos vecinos de la última guarida de Guzmán Loera aseguran que desde sus casas donde se refugiaban en lo más seguro, parecían miles de balas, muchas más de las que se observa en dicho video. 

Ellos detallan, entre risas y visible nerviosismo, que hoy, con el paso del tiempo y muchas conversaciones sobre el tema, les abría gustado saber que ahí estaba el narcotraficante más poderoso en los últimos tiempos, quien se encuentra recluido en Estados Unidos.

Te puede interesar: