En forma de homenaje, llevan restos de paramédico a Cruz Roja y Bomberos

Los Mochis, Sin.- Las sirenas fueron encendidas como cada vez que Alberto Berrelleza Herrera salía a brindar un servicio desde la base de Cruz Roja, pero en esta ocasión lamentablemente “El Berrelleza”, como era conocido dentro de las instituciones y los cuerpos de auxilio, no pudo apagarlas; sonaron como parte de un pequeño homenaje en su despedida tras perder la batalla ante el Covid-19.

Tras su deceso, fue cremado tal y como lo recomienda Coepriss, y luego sus cenizas fueron veladas por una decena de familiares cercanos durante dos horas y poco después el cortejo fúnebre se enfiló por algunas calles de la ciudad, hasta la base de Cruz Roja.

Ahí las sirenas de las ambulancias fueron encendidas para despedir a Alberto Berrelleza, quien permaneció a la benemérita institución por más de tres décadas, al servicio de la salud de la población, brindando atención prehospitalaria, salvando vidas y compartiendo sus conocimientos con las nuevas generaciones de los cuerpos de socorro.

Al llegar a la estación Central de Bomberos, ubicada en el cruce de Santos Degollado y Marcial Ordóñez, sonaron la sirena mayor “la leona”, para despedir a su compañero donde fue voluntario y en dónde deja un gran vacío por su voluntad y espíritu para servir a la gente y para velar por la salud de los demás.

El también trabajador del municipio, como paramédico de Servicio de Urgencias Médicas Municipales de Ahome (SUMMA), después fue llevado al panteón Centenario, donde un pequeño grupo de familiares sepultaron sus cenizas y aunque sus compañeros deseaban acercarse para despedirlo, no pudieron hacerlo, por las restricciones sanitarias.

Que en paz descanse Alberto Berrelleza Herrera, sin duda sus compañeros y amigos lo recordarán y extrañarán por siempre.

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