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Corredor T-Mec detonará empleos y proyectos de inversión en Sinaloa
El Consejo Empresarial Mexicano de Comercio Exterior, Inversión y Tecnología, hizo un análisis del impacto de este proyecto.
FOTO: Temática.
Culiacán, Sin.- El Corredor T-MEC traerá empleo y proyectos de inversión a Sinaloa, destacó Fernando Ruiz Huarte, Presidente del Consejo Empresarial Mexicano de Comercio Exterior, Inversión y Tecnología, A.C. (COMCE).
Resaltó lo anterior al participar en una presentación virtual de dicho proyecto, donde resaltó que, la conectividad es fundamental para tener un desarrollo del comercio exterior mexicano hacía el principal cliente que son los Estados Unidos.
Recordó que parte del proyecto consta de una red ferroviaria que en México pretende conectar Sinaloa-Monterrey-Durango y en Estados Unidos pasaría por Dallas-Tulsa-Chicago, hasta llegar a Winnipeg, en Canadá.
Manifestó que se trata del proyecto de inversión privada más relevante del 2020 y contribuye de manera importante al comercio exterior de México, ya que permitirá reducir tiempos y costos de transporte de carga continental, pero además estimulará la actividad económica en el marco del libre mercado.
“Inicia con una obra muy cerca de Mazatlán para construir un puerto y una terminal de contenedores, pero una terminal de contenedores sin conectividad realmente no es del todo utilizada o eficiente, de tal manera que es muy importante la obra del ferrocarril que se realizará de Mazatlán a Durango, es muy importante porque nosotros lo que queremos es que se fortalezca la competitividad; un proyecto de estos puede detonar la inversión y el empleo en Mazatlán, hoy más que nunca necesitamos detonar el empleo y proyectos de inversión”, expuso.
El Presidente del COMCE destacó que este gran proyecto de inversión generará a su vez nuevas inversiones, con lo cual se habrá de generar un circulo virtuoso.
Los trabajos para desarrollar este proyecto de infraestructura que conectará a los países de Norteamérica comenzarán en el segundo trimestre de 2021 con proyección a terminar en cinco años; sin embargo, se estima un periodo de desarrollo que se extendería hasta 2035.
El proyecto conecta la región económica de Asia-Pacífico en la plataforma continental de América del Norte y permite un mejor uso del Acuerdo de Asociación Transpacífico (TPP) y del TMEC.