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Entre sequía y deforestación, así llega Sinaloa al Día de la Tierra
De no hacer algo por el medio ambiente las consecuencias serían lamentables, advirtió la especialista Érika Pagaza.
Culiacán, Sin. - “Castigado” por la peor sequía en los últimos 58 años y con gran deforestación en los principales núcleos urbanos, es como Sinaloa llega al Día Mundial de la Tierra, que se conmemora este 22 de abril.
Lo anterior lo advirtió Érika Pagaza, Directora Científica del Jardín Botánico Culiacán, quien hizo un llamado a enfrentar con responsabilidad el el resultado de años de una mala cultura del consumo de los recursos naturales.
Hizo un llamado a la sociedad a unir esfuerzos para luchar contra el cambio climático y no verlo como algo ajeno, ya que éste es real y a diario provoca estragos en el mundo.
“Es una gran tragedia como la sequía, me refiero a que es una tragedia porque en el mundo el cambio de las temperaturas está provocando incendios, muchos daños, incluso a nivel de la fauna, muchos bosques están desapareciendo; eso se asocia al desequilibrio ecológico que se ha venido agravando a medida que vamos deforestando”, explicó.
Además, resaltó que plantar árboles favorece el cuidado del suelo, el clima y aporta alimentos, por lo que recomendó hacer esto en Sinaloa para enfrentar el cambio climático.
“Una de las situaciones más graves que enfrenta Sinaloa es la deforestación por los fraccionamientos, entonces la invitación que yo les hago es a que afuera de sus hogares planten un árbol nativo que puede ser una amapa, un ébano, que permanezcan los guamúchiles, mucha gente corta los guamúchiles, porque los considera árboles no muy bonitos, no con muchos beneficios, sin embargo, son árboles maravillosos que filtran el agua al subsuelo y que gracias a ellos podemos seguir teniendo agua en los pozos, además sus vainas dan alimento para las aves”, precisó.
En relación a la sequía, hoy las presas tienen sólo el 10.2%, comparado con el 52.1% del año pasado, es decir, prácticamente sólo las reservas para el consumo humano, lo que pone en jaque a actividades como la agricultura y ganadería.