Sinaloa | Norte
Denuncian a maestro de Karate en Los Mochis por violación y abuso sexual
Hasta el momento se suman 8 denuncias formales en contra del maestro, escuelas de artes marciales y colectivos feministas exigen su destitución definitiva.
Mujeres que durante su infancia y adolescencia fueron alumnas del maestro de Karate Do Miguel «B», entrenador de la escuela Sei Sui Kai, presentaron denuncias penales en la Vicefiscalia Regional de Justicia Zona Norte en su contra por los delitos de abuso sexual y violación.
Las víctimas, quienes solicitaron anonimato, dieron a conocer que los delitos antes mencionados ocurrieron hace más de 10 años cuando algunas eran menores de edad; sin embargo, debido a que el maestro continúa a cargo de menores, se armaron de valor para proceder de manera legal.
Los hechos están asentados en las carpetas de investigación 001896/2013 y 001764/2023, en las cuales se da a conocer las preguntas agresiones sexuales, abuso de autoridad y psicológico que vivieron las víctimas bajo la dirección del maestro.
Asimismo, las víctimas han dado a conocer el tema a través de oficios al Instituto Municipal del Deporte en Ahome, el Instituto Sinaloense de Cultura Física y el Deporte, así como la Asociación de Karate del Estado de Sinaloa A.C.
Por su parte, diversas escuelas de artes marciales se han pronunciado en apoyo a las víctimas dando a conocer que no participarán en torneos donde el profesor funja como organizador.
Asimismo, colectivos feministas se suman a la exigencia hacia las instituciones deportivas para que inhabiliten de manera inmediata al presunto agresor sexual.
Alejandra Reyes, vocera del colectivo Sororas, dio a conocer que mantienen contacto desde el 14 de marzo con las 8 víctimas que se han armado de valor para dar a conocer el delito y el pasado 24 de mayo giraron un oficio al director del IMDA, Felipe Juárez Soto, para entregarlo de la situación.
«Sobretodo es hacerle el llamado a las autoridades correspondientes del área del deporte a que tengan cuidado en la supervisión de estas personas que suelen tener bajo su cuidado a niños, niñas y adolescentes. Muchas veces es un secreto a voces, las víctimas no se animan a denunciar y es algo que al menos nosotras en la organización tratamos de fomentar, las denuncias formales porque las víctimas merecen una justicia legal que de un castigo a los agresores», expresó.
La activista feminista reiteró la exigencia de que el maestro deje de tener contacto con niños, niñas y adolescentes, con una supervisión estricta mientras se lleva a cabo la investigación.
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