México
Las Labradas, el impresionante sitio de grabados rupestres en las orillas del mar en Sinaloa
El sitio arqueológico de Las Labradas es el primero en Sinaloa que ha sido abierto al público.
FOTO: INAH.
Las Labradas, un asombroso sitio de grabados rupestres ubicado en una playa del sur del estado de Sinaloa, México, ha llamado la atención del mundo arqueológico y turístico.
Este enigmático lugar cuenta con más de 700 figuras talladas en rocas basálticas, donde convergen el majestuoso mar, un entorno singular y una antigua cosmovisión prehispánica.
Según recientes investigaciones, se ha determinado que Las Labradas pudo haber sido un sitio consagrado al solsticio de verano desde épocas arcaicas hasta periodos prehispánicos, lo que lo convertiría en el santuario rupestre más antiguo de todo el continente americano.
Características
- La zona arqueológica de Las Labradas se encuentra en la costa del océano Pacífico, en el ejido La Chicayota, municipio de San Ignacio, en el sur de Sinaloa.
- Rodeado de una vegetación impenetrable de arbustos de mangle, forma parte del área natural protegida conocida como la Meseta de Cacaxtla, caracterizada por su diversidad ecológica y la presencia de especies vegetales y animales endémicos.
- Desde 2009, el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) ha llevado a cabo un proyecto permanente de investigación en Las Labradas, realizando descubrimientos importantes relacionados con los grabados rupestres y las culturas que habitaron la región en la época prehispánica.
- Gracias a estas investigaciones, se ha logrado proteger y conservar este invaluable patrimonio arqueológico.
El sitio arqueológico de Las Labradas es el primero en Sinaloa que ha sido abierto al público, y en 2012 fue decretado zona de monumentos arqueológicos.
Además, ha sido incluido en la lista indicativa de la UNESCO, lo que lo posiciona como candidato para ser considerado Patrimonio de la Humanidad por la relevancia histórica y cultural que representa.
Los grabados rupestres de Las Labradas abarcan cerca de 700 figuras, incluyendo representaciones geométricas, antropomorfas, zoomorfas y fitomorfas.
Estas enigmáticas creaciones se distribuyen en rocas basálticas de diversas dimensiones, caracterizadas por su superficie lisa y pulida, redondeada por la acción del mar.
Los métodos de manufactura utilizados incluyen la abrasión y la percusión, y los grabados muestran tanto representaciones en bajo y alto relieve como la remoción de la capa superficial de las rocas.
Algunos de los grabados presentan una correlación espacial y numérica con los cuatro puntos cardinales, sugiriendo una estrecha relación con el solsticio de verano.
Durante el solsticio, específicamente entre los días 20 y 23 de junio, se puede observar el punto de detención máximo que el sol alcanza en su recorrido anual, lo que da lugar a los días más largos del año y marca el inicio de la temporada de lluvias en la región tropical.
La celebración simbólica del solsticio de verano está representada en muchos de los grabados rupestres de Las Labradas, donde los elementos solares aluden a una antigua cosmovisión prehispánica que exalta y adora al sol como origen y lugar de convergencia.
Esta conexión con el solsticio de verano agrega un significado más profundo y espiritual a este valioso patrimonio arqueológico.
El arqueólogo Víctor Joel Santos Ramírez, investigador del Centro INAH Sinaloa y director del Proyecto Arqueológico Las Labradas desde 2009, ha sido fundamental en el estudio y protección de este sitio único en su tipo.
Gracias a su trabajo, Las Labradas se posiciona como un tesoro arqueológico de gran relevancia histórica, cultural y espiritual para el estado de Sinaloa y para todo México.
