5 consejos para que tu perfume dure el mayor tiempo posible

Estos consejos pueden hacer que tu perfume se disfrute durante más tiempo. FOTO: Pexels / Infobae

Ponerse perfume es una de las prácticas más indispensables en muchas personas; así sea para ir a trabajar, tener una cita o meramente salir de casa, rociarse de perfume es una actividad cotidiana para gran parte de la población.

Ahora, es una realidad que a cada persona le han inculcado de forma distinta el cómo echarse el perfume. En qué partes del cuerpo, qué cantidad rociarse, si tallarse o no, si volverte a poner cada ciertas horas; hay muchos mitos al respecto, así que aquí te daremos 5 consejos para que tu fragancia dure el mayor tiempo posible.

Usa el perfume ideal

No basta con escoger un perfume que huela rico, tienes que fijarte en el ph de tu sudor, tu tipo de piel y el entorno en el cual habrás de utilizarlo.

Por ejemplo, si tienes un ph fuerte o un tipo de piel seca te convendrá utilizar fragancias concentradas y con tonos más fuertes para que el perfume dure más. La persona encargada de venderte el perfume puede ayudarte en ese aspecto.

Aplicarlo en la zona adecuada

Uno de los temas más polémicos. Los lugares ideales para rociar tu perfume, debido a que hay una mejor circulación y absorbencia de la piel, son:

las muñecas
el cuello
las clavículas
detrás de los lóbulos de las orejas

Espera el momento ideal

El mejor momento para rociarte perfume es, por más extraño que te parezca, justo después de bañarte, esto debido a que cuando sales de la ducha, la fricción del jabón o esponja al limpiarte y el vapor hacen que se abran tus poros, eso facilita la absorción del perfume.

No frotar en las muñecas

Algo que mucha gente hace pero que está prohibidísimo. Frotar el perfume con tus muñecas solo provocará que la fricción diluye los componentes de la fragancia.

Rocía un poco en la ropa

Lo más importante es rociar tu cuerpo, pero un poco de perfume en tu ropa ayudará a que se mantenga el olor durante más tiempo. Trata de no aplicarlo directamente en la tela de la ropa, ya que esta podría dañarse, sino más bien procura rociar ligeramente en el aire para posteriormente pasar por ahí.