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Avon, la histórica empresa de cosméticos, se va a la quiebra por esta razón
La noticia llega en medio de una creciente controversia legal relacionada con el talco utilizado en sus productos.
FOTO: Cortesía.
En un giro inesperado que ha sacudido el mundo de la cosmética, Avon, la histórica empresa conocida por sus productos de belleza y su modelo de venta directa, ha anunciado su declaración de quiebra bajo el Capítulo 11 en Estados Unidos.
La noticia llega en medio de una creciente controversia legal relacionada con el talco utilizado en sus productos.
Avon, un nombre que durante décadas ha sido sinónimo de belleza y empoderamiento femenino, se encuentra ahora en una encrucijada financiera.
Protección de quiebra:
- La compañía ha solicitado protección bajo el Capítulo 11 del Código de Quiebras de Estados Unidos, un proceso legal que le permitirá reorganizar sus deudas y negociar con sus acreedores mientras sigue operando.
La decisión responde a la presión de aproximadamente 200 demandas en Estados Unidos que acusan a la marca de vender productos de talco contaminados con amianto, un mineral vinculado al cáncer.
En un comunicado oficial emitido el 12 de agosto, Avon Products informó: "La sociedad financiera ´no operacional´ con base en Estados Unidos ha apelado a la protección del Capítulo 11 para enfrentar sus deudas y responsabilidades legales relacionadas con el talco".
Este proceso es una medida habitual para empresas que buscan reestructurar sus finanzas sin liquidar activos o detener sus operaciones.
Las demandas contra Avon se centran en alegaciones de que sus polvos faciales y sombras de ojos contienen talco contaminado con asbesto.
¿Provocan cáncer?
El caso ha ganado notoriedad después de que en diciembre de 2022 un jurado en Los Ángeles ordenara a Avon pagar más de 50 millones de dólares a una mujer que desarrolló cáncer después de usar estos productos.
John Dubel, presidente de Avon Products, destacó que la declaración de quiebra "maximizará el valor de nuestros activos y permitirá abordar nuestras obligaciones de manera ordenada".
Por su parte, Kristof Neirynck, director ejecutivo de Avon, aseguró que la empresa seguirá enfocada en avanzar con su estrategia internacional, que incluye la modernización del modelo de venta directa y la revitalización de la marca para impulsar el crecimiento.
A pesar de estos desafíos, Avon ha confirmado que la quiebra no afectará a sus operaciones fuera de Estados Unidos. Las tiendas y negocios de Avon en México y otros mercados internacionales seguirán funcionando con normalidad.
"Los negocios operativos fuera de la Unión Americana no forman parte de los procedimientos del Capítulo 11", aclaró el comunicado.
La declaración de quiebra de Avon marca el fin de una era para una marca que ha sido un pilar en la industria de la belleza y ha proporcionado a muchas mujeres una plataforma para emprender.
El impacto de esta crisis legal y financiera se sentirá tanto a nivel corporativo como en las vidas de las miles de personas que han construido sus negocios alrededor de los productos Avon.
La noticia deja muchas preguntas sobre el futuro de la marca, pero por ahora, los puntos de venta en México y otros mercados internacionales seguirán operando, mientras Avon se enfoca en resolver sus problemas financieros en Estados Unidos.
