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Así amaneció el nivel de las presas de Sinaloa este 23 de agosto 2024
Las lluvias de los últimos días dejaron una increíble mejoría en la cantidad de agua almacenada.
A pesar de las lluvias, la mayoría de las presas no están ni al 50 % de su capacidad. FOTO: Luz Noticias
Durante varios meses, las 13 presas que se encuentran en Sinaloa vivieron momentos de terror al registrar muy poco almacenamiento de agua debido a la sequía; afortunadamente, las recientes lluvias en todo el estado ayudaron a que la gran mayoría de estas mejoraras considerablemente sus números.
A este nivel se encuentran en los primeros días de agosto 2024
-Luis Donaldo Colosio 42.5%
-Miguel Hidalgo: 8%
-Josefa Ortiz de Domínguez: 7.4%
-Gustavo Díaz Ordaz: 35.4%
-Guillermo Blake: 28.7%
- Eustaquio Buelna: 11.8%
- Adolfo López Mateos: 15.9%
- Sanalona: 35.6%
- Juan Guerrero Alcocer: 13.1%
-José López Portillo: 18.6%
-Aurelio Benassini 41.9%
-Picachos 100.9 %
La presa Luis Donaldo Colosio, una de las más grandes del estado, se encuentra al 42.5% de su capacidad. La situación es crítica en la presa Miguel Hidalgo, con solo un 8% de almacenamiento.
La presa Josefa Ortiz de Domínguez tampoco muestra mejores números, almacenando apenas el 7.4% de su capacidad. Por su parte, la presa Gustavo Díaz Ordaz está al 35.4%, mientras que la Guillermo Blake alcanza el 28.7%.
En otras partes del estado, la presa Eustaquio Buelna se encuentra al 11.8% y la Adolfo López Mateos al 15.9%. Sanalona, una de las principales fuentes de agua para la capital del estado, está al 35.6%.
La presa Juan Guerrero Alcocer, crucial para la región del Fuerte, está al 13.1%, y la José López Portillo al 18.6%. Aurelio Benassini se encuentra al 41.9%, mientras que la presa Picachos, una de las pocas excepciones, se encuentra en una situación más favorable con un 100.9% de su capacidad.
Actualmente, las aportaciones a estas presas son de 425.4 metros cúbicos por segundo (m³/s), una cifra que, aunque considerable, no es suficiente para revertir el déficit acumulado ni para garantizar un abastecimiento adecuado en los meses venideros.
La baja en los niveles de agua almacenada tiene implicaciones directas en la agricultura, la industria y el consumo doméstico. Las autoridades estatales y municipales mantienen semáforo rojo en el abasto para el consumo humano.
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