Sinaloa | 06/16/2016 | Ernesto Torres
Los Mochis, Sin.- Crítica la situación para los comerciantes de la central de abastos de Los Mochis, manifiestan que al terminarse la producción y hortalizas de la región los precios se elevan y le pega tanto al “yardero” como al consumidor.
Manuel Pérez, comerciante de la yarda grande, aseguró que desde hace tiempo el negocio da sólo para pasarla y que se mantienen sumidos en la crisis, porque cuando termina la agricultura, la pesca entra en veda, además las ventas bajan y el precio se eleva, afectando a la clase baja.
Detalló que en estos casos los de menos recursos son lo que compran en la yarda, porque de esta manera se ahorran unos pesos, pero que si se termina el producto regional están en desventaja de las tiendas de autoservicio y supermercados grandes.
Opinó que los negocios que se abren en las colonias también les pega a su giro, porque la crisis ocasiona que la gente busque opciones de ganarse la vida.
El joven comerciante dijo que la gente se queja de los precios, sobre todo del aguacate, que su precio va de 42 a 50 pesos el kilo, y del limón, que está de 18 a 22 pesos el kilogramo, todo depende del tamaño, porque no hay producto regional y que con el de exportación se eleva el precio.
Adelantó que en el caso del tomate, se está terminando el regional y que las reservas en la central de abastos se están agotando, por lo que en los próximos días aumentará su precio de 10 o 12 pesos subirá a los 18 pesos por kilogramo según la calidad.