País-Mundo | 06/16/2017 | Notimex
Lerma, .- En 1897 el químico alemán Felix Hoffmann sintetizó el ácido acetilsalicílico y así inició la historia de la aspirina, medicamento sugerido para tratar los síntomas del resfriado, de la fiebre y del dolor, además de prevenir problemas cardiacos.
Tras su síntesis, el ingrediente activo se vendió como un polvo blanco dentro de frascos de cristal en Alemania; después se convirtió en tabletas cilíndricas a las que se le sumaron nuevas sustancias.
La aspirina se fabricó desde 1961 en la Ciudad de México. Luego, con la ampliación del portafolio de productos del laboratorio Bayer, su planta se mudó a Lerma en el Estado de México, lugar en el que desde hace 20 años se producen más de mil millones de tabletas de la presentación OTC.
De acuerdo con el responsable de la planta, Frank Wilgmann, se producen cada año de 65 a 78 millones de cajas del producto, lo que suma cerca de 13 mil millones de tabletas en 20 años, de las cuales 42 por ciento se exporta y el resto se vende en el mercado doméstico.
En entrevista el directivo expuso que uno de los principales retos de la aspirina para permanecer en el mercado a nivel mundial es mantener los costos competitivos con la alta calidad que distingue a Bayer con las diferentes presiones del mercado.
Explicó que la capacidad de la planta, en la que también se fabrican y empacan otros productos, contribuye a mantener los costos.
Destacó que la marca es muy conocida y los consumidores agradecen su calidad; “la gente en México tiene una conexión muy grande con el producto, lo que es muy interesante porque ocurre lo mismo en Alemania”.
“Creo que si una marca tiene una historia de 120 años le esperan otros 120 años en el futuro, es una fórmula que tiene uno de los mejores activos contra el dolor”, sostuvo el directivo.
Wilgmann aseguró que por el momento la capacidad de la fábrica en México cumple con los requerimientos del mercado, con 520 empleados que laboran hasta en tres turnos, lo que depende de la demanda, aunque reconoció que podría ser ampliada.
El directivo precisó que la planta mexiquense cuenta con 15 hectáreas, de las cuales 7.5 se encuentran ocupadas por el edificio de producción, tres laboratorios de calidad, almacén, centro de distribución y de energías, entre otros.
Respecto a la ampliación, dijo: “es una posibilidad, es una planta estratégica muy importante para el consumo, por el momento estamos estables en México”.
El responsable de Asuntos Médicos y Desarrollo Clínico a nivel mundial de la división Consumer Health de Bayer, Michael Voelker, señaló que el ácido acetilsalicílico sigue siendo uno de los principales retos de los investigadores y muestra de ello es que fue el protagonista de más de mil 900 publicaciones en 2016.
De acuerdo con el jefe de Cardiología del Hospital de Tacuba del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), Carlos Narváez Oriani, entre los beneficios de la aspirina, en dosis bajas, se encuentra la prevención de enfermedades cardiovasculares en pacientes con factores de riesgo.
El especialista destacó que, por su efectividad y bajo costo, la aspirina es el primer medicamento recomendado para prevenir accidentes cerebrovasculares y cardiovasculares.
La aspirina ha estado en la lista de medicamentos esenciales de la Organización Mundial de la Salud (OMS) desde 1977 y es una marca registrada en 147 países, entre ellos México, en el que tiene 12.6 por ciento de participación en el mercado, con un consumo de 700 millones de pastillas.