Agro | 09/27/2018 | Manuel Aceves
Culiacán, Sin.- A las empresas afectadas por muerte de ganado durante las recientes lluvias no les convendría comercializar la carne de las especies que causaron baja, aseguró el subsecretario de Ganadería del Gobierno del Estado, José Raúl Cárdenas Ávila.
Lo anterior luego de las inquietudes surgidas ante la posibilidad de que se esté comercializando la carne de animales muertos que fueron “rapiñados” y que de acuerdo a especialistas, podrían ser altamente peligrosos por el contacto que estos tuvieron con aguas del drenaje.
Cárdenas Ávila citó a rueda de prensa para actualizar el número de pérdidas en el sector ganadero, el cual se redujo de 17 mil cabezas de ganado sin vida y desaparecidas a tan sólo 4 mil 500, tomando como referencia la cifra declarada el pasado lunes 24 de septiembre por el Secretario de Agricultura y Ganadería, Jesús Valdés Palazuelos.
Aunque sin pruebas gráficas para respaldar lo dicho, resaltó que la mayoría de las empresas han dado un tratamiento adecuado a los cadáveres a fin de evitar focos de infección, pero además negó que durante las lluvias se tuvieran reportes de robo de ganado y fue enfático en que no existen elementos para indicar que la contaminada está siendo comercializada por particulares o empresas.
“Es muy difícil que alguien diga que, esos animales, para empezar no había ni la forma de llegar a los predios, y ellos (los empresarios) no ocupan que llegue una autoridad a decirles lo que tienen que hacer, ellos lo hacen de inmediato porque tienen mucho más animales vivos”.
“Y nos hemos abocado ahorita a la tarea de trabajar con la gente informarle sobre la disposición de los cadáveres, que es una parte importante para evitar una diseminación de una enfermedad para los mismos animales, para los trabajadores de los predios y de la población”.
Por su parte Leonel Murillo, representante en la zona noroeste del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (SENASICA), aseguró—también sin evidencia gráfica—que se han hecho los recorridos por la centro y norte, verificando un tratamiento adecuado a los animales muertos por inmersión líquida. Resaltó que la mayor afectación se tuvo en una granja porcícola de Ahome, donde se solicitó encalar los cadáveres y bien depositarles creolina, ya que debido a la humedad no se han podido hacer las fosas para enterrarlos.
Negó la posibilidad de que algunos carniceros o empresas estén comercializando la carne de animales ahogados, ya que la mayoría respeta los procesos sanitarios.
“Hablar de consumo de un animal en estado de descomposición, nosotros tenemos en Sinaloa una cultura de consumo de carnes, toda la carne que llega, llega en caja y la principal industria comercializadora de carne que es la engordadora es una de las que no tuvo afectaciones en cuanto a pérdida de animales, y para que un animal sea sacrificado, hay una inspección antemortem donde se garantiza que ese animal no va enfermo, no va fracturado, todo lo que va a una planta de Tipo Inspección Federal, no representa riesgo”.
Respecto al ganado que sobrevivió, pero que estuvo a punto de ahogarse y consumió agua de los drenes, ambos funcionarios descartaron riesgos de enfermedades y focos de infección, ya que aseguraron que este tipo de animales suele consumir agua de los drenes habitualmente.