Sinaloa | 12/05/2018 | Jessi Jáuregui
Los Mochis, Sin.- La fe, la esperanza y el amor de la Navidad se hicieron presentes este miércoles en el asilo Santa Rosa, gracias al Patronato y a las Damas Voluntarias que organizaron una posada para los más de 86 ancianos que permanecen albergados en estas instalaciones ubicadas en el Campo 35.
Karelia Castro Sánchez, coordinadora del Asilo Santa Rosa, detalló que el evento inició con una misa donde se pidió a Dios por la salud de todos los adultos mayores, especialmente para aquellos que padecen alguna enfermedad.
Posteriormente se degustó de barbacoa, uno de los platillos favoritos de la mayoría de las personas de la tercera edad del asilo; chocolate caliente, pan, churros y se entregaron algunos regalos, así como ropa de invierno.
“Este es un evento que organiza el Patronato, este asilo es una combinación de una asociación civil y del DIF y el Gobierno. Este evento lo organiza el Patronato y, la verdad, muy contentos porque vienen y les traen regalos las damas voluntarios, les damos comida especial y viene una carreta de churros”.
Los adultos mayores disfrutaron de la compañía y las atenciones, por lo que agradecieron a cada una de las personas que dedicaron tiempo y esfuerzo para que pasaran momentos agradables.
Como agradecimiento, don Raymundo Rodríguez cantó un corrido que el mismo compuso para el asilo Santa Rosa a todos los organizadores y para los radioescuchas de Fórmula|Luz Noticias a quienes les pidió no olvidarse de los ancianos de este albergue.
“… Yo le digo a mis amigos que no nos dejen de amar, porque vienen de Los Mochis nada más a trabajar. Quien compuso este corrido se llama Raymundo Rodríguez, aquí se acaba el corrido del asilo Santa Rosa”.
Cabe resaltar que en estos momentos se activa la campaña de donación de ropa de frío para los adultos mayores del asilo. Las personas que deseen ayudar pueden acudir a sus instalaciones ubicadas en el Campo 35; o bien, pueden ir a El Caníbal Vegetariano.
Además, también pueden donar pañales, artículos de limpieza personal, comida y sobre todo, tiempo. Lo que más valoran los ancianos es esto último, es tener la oportunidad de ser escuchados y platicar durante su estancia en el asilo.