Sinaloa | 12/11/2018 | Esthela García
Los Mochis, Sin.- Por primera vez en su historia la revista Time reconoce a periodistas en el mundo como personajes para su edición 2018, y la mochitense Dulcina Parra, forma parte de este selecto grupo, como la única periodista de México por su trabajo con el grupo "Las Rastreadoras de El Fuerte".
El título de personaje del año es una tradición de la revista desde 1927, en esta edición detalla el trabajo que se realiza para localizar a las personas que son víctimas de desaparición forzada, derivado de problema de violencia y narcotráfico que se vive en Sinaloa y en todo el país..
"Dulcina Parra cubre el crimen como periodista de radio en Los Mochis, una ciudad en el estado mexicano de Sinaloa que ha sido devastada por la violencia de las drogas. Este año, trabajó para dar a conocer los esfuerzos de Las Rastreadoras de El Fuerte, un grupo de madres dedicadas a la búsqueda de las que se cree fueron secuestradas o asesinadas por cárteles, un número estimado en más de 37,000. En 2009, ella misma fue secuestrada después de investigar amenazas a médicos en un hospital local en medio de enfrentamientos de pandillas”, dice parte de la publicación.
Para Dulcina Parra el reconocimiento internacional le tomó por sorpresa y hace un par días fue contactada para la entrevista por el corresponsal Moisés Saman, ella asegura que significa un mayor compromiso social y profesional.
"Es un reto y a la vez un compromiso que me hace ser más responsable, con lo que digo, con lo que hago y por supuesto comprometida con la veracidad y tener mayor contacto con las personas afectadas", señaló.
De periodista a víctima, de víctima a activista
Fue el 19 de diciembre del año 2009 cuando Dulcina Parra fue victima de desaparición forzada por un grupo del crimen organizado, hecho que se derivó de un trabajo periodístico realizado días antes, el cual identificaba a los integrantes de un cártel del narcotráfico en un hospital de la ciudad.
Como periodista, al cubrir este tipo de hechos, recordó cada segundo que vivió al estar privada de su libertad, el miedo, el dolor y principalmente la impotencia, sentimientos que cambiaron su vida y su quehacer periodístico.
"Una palabra me salvo lo que es la vida, después de que me estuvieron habiendo una serie de cuestionamientos, que ya están dentro de una denuncia, me estuvieron preguntando sobre mi trabajo, al final de cuentas ellos saben quién está metido y quién no, en aquel momento uno de mis captores me preguntó, que si tuviera una oportunidad de vida ¿Cuáles serían mis últimas palabras?, Yo le dije que ojalá que Dios lo bendijera porque iba a dejar unas niñas huérfanas, yo sólo estaba haciendo mi trabajo y en ese momento él me dijo: hoy no te vas. Yo nací un 26 de agosto de 1975 biológicamente, pero volví a nacer un 19 de diciembre de 2009", recordó.
La comunicadora añadió que este reconocimiento que se hace a su trabajo periodístico va dedicado a todas las mujeres que se esfuerzan día a día por salir adelante, a todas las madres de familia que luchan por un mejor futuro para sus hijos, a las madres que no descansan para encontrar a sus hijos desaparecidos "sea vivos o muertos".