Sinaloa | 06/24/2019 04:49:00 p. m. | Jessi Jáuregui
Los Mochis, Sin.- La festividad de San Juan Bautista, vincula las tradiciones paganas ancestrales con el cristianismo.
Para los indígenas primigenios, era la tradición y honra al solsticio de verano, al Dios solar; para los católicos, es revivir la acción que Zacarías hizo para anunciar a los cuatro puntos cardinales el nacimiento de su hijo –San Juan-, encendiendo una hoguera.
Esta tradición pagano-cristiana, está muy arraigada en el pueblo yoreme, y año con año los mayo-cahítas buscan su conservación.
Don Teodoro Castañeda Valenzuela, pascola mayor, vecino del ejido Ohuira pero arraigado al centro ceremonial del ejido 5 de Mayo, reconoce el origen, pero guarda cada proceso del ritual como joyas en su memoria porque forman parte de la identidad sus antepasados y la propia.
“Ya tengo edad, tengo 67 años, yo empecé a bailar a los 13 años; a esa edad yo me fui fijando en los viejos, poniéndoles atención, y ahorita ya soy pascola mayor, porque no nada más es llegar, se tiene que saber”.
“Cuando abrimos la fiesta, se abre desde pedirle a él (San Juan) para pedirle permiso para empezar a trabajar, y que nos mande desde arriba las bendiciones y que no nos pase nada durante toda la noche. Y eso de la religión de nosotros es eso, festejarlo, que no se pierda. Y aquí se baña en el canal porque no ha río cerca”.
Para él cada símbolo de su “religión” debe respetarse y cumplirse cabalmente durante el ritual. Aunque en el centro ceremonial del ejido 5 de Mayo no tienen cerca un río, éste es sustituido por el canal que pasa cerca, y así cumplen con el tradicional baño a San Juan. Santo que es prácticamente una reliquia y del cual desconoce de dónde surgió la imagen y cuánto tiempo lleva en ese recinto yoreme.
Este año, el alcalde Manuel Guillermo Champan Moreno fue el invitado especial, quien acompañó a los indígenas durante los bailes a San Juan, acción que causó alegría entre la comunidad.