Sinaloa | 01/05/2020 06:15:00 p. m. | Víctor Acosta
Los Mochis, Sin.- El desinterés de los ahomenses por acatar el llamado de la autoridad municipal a no dar dinero a los infantes pedigüeños, podría generar en un futuro que las calles y bulevares principales de la ciudad de Los Mochis, se colmen de niños y niñas que buscan las monedas de los automovilistas, toda vez que ya hay casos de menores que emigran de otros estados, para instalarse en la ciudad, a fin de pedir dinero.
Hilda Rodrigo Ochoa, directora del Sistema DIF de Ahome, manifestó que las dádivas de los ahomenses han trascendido a tal grado al exterior del municipio, y donde se tiene el conocimiento de que los infantes que piden dinero logran ganar hasta 600 pesos diarios, que se ha iniciado con un fenómeno en donde algunas familias llegan, incluso, de otros estados, sólo para solicitar la moneda al automovilista.
La funcionaria lamentó que pese a los esfuerzos de los gobiernos, por erradicar la problemática, esto no ha sido posible y ahora existe la posibilidad de un empeoramiento de la situación, por la apatía de la gente.
“Mira, ¿qué pasa? que nosotros, como ciudadanía, seguimos apoyando a esas personas. Yo estando trabajando en un bulevar con los niños, llega una familia y le entrega muchísimas cosas a la gente, entonces las personas ven que sigue siendo un negocio estar en los bulevares. Hay gente que no era de la ciudad, que vienen de otras ciudades aquí ¿por qué? porque somos muy generosos en el municipio y ellos mismo nos dicen, el tal ciudad de la que vengo, pues no me dan tanto dinero como aquí en Los Mochis”, dijo.
En ese sentido, Rodrigo Ochoa externó que en las próximas semanas, presentarán una nueva campaña de concientización al tema; sin embargo, mencionó que en tanto permanezca esa actitud de los ahomenses de entregar dinero, movidos por un sentimiento de compasión, las campañas estarán destinadas al fracaso y las personas que piden dinero en las calles seguirán en aumento.
Agregó que el trabajo que hace el DIF de Ahome es arduo y desde el núcleo familiar, pero que hasta ahora no ha sido suficiente para erradicar la situación, como se desea.