Seguridad | 03/17/2020 05:00:00 p. m. | Jessi Jáuregui
Ahome, Sin.- Han pasado ya siete años, de caminar largos senderos, explorar predios enmontados y cubiertos de maleza, incluso de escombro y basura, para que la líder del colectivo Rastreadoras por la Paz de Sinaloa, pudiera localizar a su hijo quien fue privado de su libertad y desde entonces se encontraba desaparecido.
Este martes, Claudia Rosas Pacheco, salió a una búsqueda junto a sus hijas y hermana, quienes siempre la acompañan no solo en su dolor, sino en su andar por esos predios salitrosos o fangosos, en busca de Javier Fernando Quezada Rosas, quien fue “levantado” por un comando armado el 11 de abril del 2013, mientras se encontraba con unos amigos en una de las plazoletas de la colonia 12 de Octubre de Los Mochis.
Hoy como otros días de búsqueda, las rastreadoras se encomendaron a Dios, pidiendo siempre tener una búsqueda positiva, regresar con bien a casa, y poder encontrar a su hijo.
Esta tarde, localizaron una fosa, con al menos un cuerpo reducido a osamenta, mismo que según la propia Claudia Rosas, podría tratarse de su hijo, por la vestimenta encontrada y el calzado, que traía Javier Fernando, cuando fue privado de su libertad.
El hallazgo se registró en una fosa clandestina, en el predio de El Guachapori, en las inmediaciones del ejido Cobayme, Ahome; en donde ya ellas, y otros colectivos, han localizado alrededor de 75 cuerpos y osamentas enterrados en lo que consideran un panteón clandestino.
En el sitio continúan las exploraciones, mientras personal de Servicios Periciales realiza los trabajos de exhumación de la osamenta, misma que será trasladada a una funeraria de Los Mochis, en tanto la Fiscalía de Sinaloa, le practica los exámenes de ADN, para confirmar la identidad, ya que hasta el momentos solo trascendió que se trataba del hijo de la también jefa de la Oficina de Apoyo a Búsqueda de Personas en Ahome, por la ropa que localizada.
Cabe mencionar, que anteriormente el 14 de julio del 2017, también Mirna Nereida Medina Quiñonez, líder del colectivo Rastreadoras de El Fuerte, localizó a su hijo en una fosas de Colome, El Fuerte, tras buscarlo más de tres años, luego de que fuera privado de su libertad.