Seguridad | 03/22/2020 01:29:00 p. m. | Ernesto Torres
Los Mochis, Sin.- La Fiscalía de Sinaloa entregó ayer sábado los restos humanos localizados el pasado martes, por la líder del colectivo Rastreadores por La Paz de Sinaloa, quien lo identificó desde el primer momento como su hijo por la vestimenta y calzado.
Todo indica que se trata de Javier Fernando Quezada Rosas, quien fue privado de su libertad por un comando armado el 13 de junio de 2013, mientras se encontraba con unos amigos en una plazoleta de la colonia 12 de Octubre de Los Mochis; fue encontrado el martes 17 de marzo por su familia, integrantes y fundadores del colectivo Rastreadoras por La Paz de Sinaloa.
Luego de las diligencias, el cuerpo fue trasladado a una funeraria de Los Mochis, donde permanece bajo resguardo, en tanto la Fiscalía realiza las pruebas de ADN en el laboratorio de genética de Culiacán, para confirmar la identidad oficial como el restos de los hallazgos.
La tarde de ayer, el organismo estatal liberó los restos, ya que al parecer todo coincide con las características y vestimenta que traía el hijo de la buscadora al momento que lo privaron.
El hallazgo se registró cinco días antes, en una fosa clandestina, en el predio de El Guachapori, en las inmediaciones del ejido Cobayme, Ahome; en donde ya ellas y otros colectivos han localizado alrededor de 81 cuerpos y osamentas enterrados, en lo que consideran un panteón clandestino, sumados los seis encontrados el miércoles, un día después del hallazgo de Javier.
Cabe mencionar, que anteriormente el 14 de julio del 2017, también Mirna Nereida Medina Quiñonez, líder del colectivo Rastreadoras de El Fuerte, localizó a su hijo en una fosas de Colome, El Fuerte, tras buscarlo más de tres años, luego de que fuera privado de su libertad de una gasolinera en El Fuerte.
Además de la entrega de este cuerpo, la Fiscalía liberó previamente las osamentas de dos hermanos, quienes luego de encontrarlos, realizaron varias pruebas genéticas, ya que no podrían confirmar quién era cada hermano.
Se trata de los hermanos Lenni Francisco y Jesús Iván Álvarez Castro, de 22 y 35 años de edad respectivamente y quienes habían sido privados de la libertad el 17 de mayo del 2017 al salir de su domicilio en la Higuera de Zaragoza.
Fue el pasado miércoles 18 de marzo, tras notificarle a la familia, que los resultados de ADN, en los restos óseos encontrados por las Rastreadoras por La Paz de Sinaloa en el predio conocido como La Robalera en la sindicatura de Higuera de Zaragoza, dieron positivo para los hermanos Álvarez Castro.