Sinaloa | 08/13/2021 10:24:00 a. m. | Esthela García
Los Mochis, Sin.- Este 13 de agosto se cumplen 500 años de la caída de México-Tenochtitlan, la gran ciudad del imperio Mexica, cuyos vestigios aún se encuentran en las entrañas de la capital del país.
Fue el 22 de abril de 1519 el día en que Hernán Cortés desembarco en las costas de Veracruz y, para el mes de noviembre, se encontró por primera vez con el Tlatoani de los Mexicas, Moctezuma Xocoyotzin, quién le permitió el ingreso a la ciudad. Dos años después, el 13 de agosto de 1521, se produjo la caída de la gran ciudad México-Tenochtitlan.
Rosario Valenzuela Huichol, Gobernador Indígena del Ejido 5 de Mayo, destacó que hay muchos testimonios, desde los primeros contactos con los españoles, en los que a pesar de la conquista los pueblos indígenas han luchado por conservar las tradiciones y la cultura ancestral de este país.
"Como comunidad Yoreme de esta región del país, nos sentimos orgullosos de nuestras tradiciones, de nuestra lengua, y de nuestros valores que nos sostienen. A nuestras generaciones, que se den el tiempo de conocer y valorar nuestras tradiciones y nuestras costumbres, de tal forma que puedan amarlas y mantenerlas para que en el mañana sepamos de dónde venimos y podamos construir un futuro armonioso y en paz", manifestó.
En un homenaje a esta lucha de los antepasados, en el municipio de Ahome se izó la bandera a toda asta y, ahí, el alcalde de Ahome, Manuel Guillermo Chapman Moreno, recordó que la historia de México está marcada por la desigualdad y la injusticia y exhorto a los pueblos originarios a no permitir que ninguna autoridad vuelva a lastimar la dignidad histórica y cultural de los pueblos indígenas.
"Que no permitan nunca más que un gobernante o una autoridad pública, mancille, lastime y humille la dignidad histórica y cultural de los pueblos indígenas y que solamente con la participación genuina, auténtica, sincera y amorosa en la vida política y pública, juntos, sociedad civil y gobierno, lograremos este México que nos merecemos", manifestó.
Los pueblos indígenas Yoremes de Ahome recordaron que, después de 500 años, la resistencia sigue, y es una batalla diaria que enfrentan con las nuevas generaciones, para impedir que desaparezca la lengua, costumbres y tradiciones.