Seguridad | 10/09/2021 07:35:00 a. m. | Angel Zamudio
La joven Kenia María vivió con terror los últimos minutos de su vida, pues su pareja sentimental, desde hacía dos años, la mató atacándola con un bisturí y, además, presuntamente le dejó caer un block de concreto en la cabeza.
El acusado, identificado como Juan José, Juanjo, como le decía la joven de cariño, fue procesado ante la autoridad y ayer viernes se llevó a cabo la audiencia inicial, en la que se dieron a conocer detalles del asesinato.
De acuerdo con lo relatado durante la audiencia, Kenia María aviso a su mamá alrededor de las 19:30 horas del martes que saldría a cenar con Juan José.
Posteriormente, la mamá de la joven le mando mensaje para que le llevara un sushi, sin saber que su hija estaba a punto de morir a manos de su novio.
Al no haber respuesta de la joven, su mamá le hizo un par de llamadas y no fue hasta la tercera que la joven contestó, pidiendo ayuda... «auxilio, mamá, Juan José me quiere matar», de fondo se escuchó la voz de su yerno, quien gritó antes que se cortara la llamada: «la voy a matar».
Un último mensaje se recibió, era ella avisando que el responsable la llevaba al ejido El 30.
El miedo de la madre hizo que acudiera a la casa de los papás del joven y les explicó lo que acababa de escuchar y les pidió que le ayudaran a localizarlos, pues ninguno de los dos le contestaba el teléfono.
La mamá de Juanjo le marcó y, sin dar tiempo al intercambio de palabras, él contestó diciendo que tenía miedo de que lo metieran a la cárcel, pues ya había cometido el asesinato.
Los padre de ambos se dirigieron al ejido El 30, pero en Costa Rica observaron una escena del crimen a un costado del estadio de futbol, ubicado en la avenida Guasave, entre las calles Navolato y San Ignacio.
En esa ubicación yacía el cuerpo de Kenia María, con heridas de arma blanca y golpes en la cabeza.
Minutos después, se informaba de la detención de un hombre que circulaba a exceso de velocidad en un auto Spark blanco, en la calle Segunda del ejido El 30: era Juan José, que al descender de la unidad tenía manchas de sangre en todo el cuerpo y solo dijo: «ya la regué, ni modo»
Esa misma madrugada, el presunto asesino fue puesto a disposición de las autoridades y ayer fue el centro de la audiencia, donde fue vinculado a proceso por el delito de feminicidio agravado por relación de hecho y quedó bajo prisión preventiva, con plazo de tres meses, para concluir la investigación.