Sinaloa | 11/02/2022 01:10:00 p. m. | Alicia González
Como cada Día de Muertos, los panteones lucen llenos de gente que van a visitar las tumbas de sus seres queridos que ya partieron, a las que llenan de flores, globos y demás decoraciones para que el lugar en donde están sus cuerpos luzca lindo, con su césped recortadito y bien limpiecito.
Así también es como se encuentra la tumba de Dora Esmeralda, mejor conocida por sus amigos y familiares como «Doki», quien hace cinco años falleció a sus 13 añitos cuando se encontraba en el mar y fue arrastrada por las olas.
Su mami, Gloria, cuenta que «Doki» era como una sirena, pues amaba pasar tiempo en el agua; si no podían llevarla a la playa, tenían que llenarle una alberca con agua para que se entretuviera.
Gloria platica que Doki era una niña muy alegre, llena de energía y muy sociable, con muchos amigos que aún acuden al panteón para visitarla y este día no ha sido la excepción.
Los jóvenes, que ahora tienen alrededor de 18 años, la recuerdan cada 2 de noviembre con un altar en su honor, comenta Gloria con orgullo y alegría.
Aunque Doki falleció muy joven, Gloria expresa que aunque el dolor de su partida aún duele, a veces como si el incidente hubiera ocurrido ayer, le agradece a Dios que se la haya «prestado» 13 años.
Y le ha dado un poderoso significado a su muerte: que su hija falleció en el lugar que más le gustaba. Gloria asegura que el mar ganó una sirena y el cielo a la más brillante y hermosa estrella.