Sinaloa | 02/09/2023 05:04:00 p. m. | Luz Noticias
Mazatlán ha sabido distinguirse del resto de los municipios de Sinaloa al consagrarse como la joya del turismo, con su largo malecón, por tener el Carnaval más importante, mismo que se cuela como uno de los tres más grandes del planeta, así como su gastronomía.
Y es, precisamente, el plano gastronómico el que resalta con su tradicional ceviche de sierra, el picosito aguachile, su escabeche de marlin, su paté de camarón o sus deliciosos suaves sabores coco, pero también por tener uno de los más polémicos platillos, la campechana caliente.
Preparada con caldo de camarón, el cual se obtiene con la cocción de camarón, a la que se le agrega una mezcla de tomate, cebolla, además de otros ingredientes, como ajo, orégano y sal; este alimento es tradicional en esta región del sur de Sinaloa, donde se consume así, calentita, para bajar la cruda.
Su historia no es como la de otros platillos, ya que no hay un «inventor» como tal, simplemente, es algo tradicional desde que la civilización de pescadores y pobladores comenzó a crecer en Mazatlán, El Rosario y Escuinapa, señaló Pedro Aguilar Zamudio, quien desde 1958 se ha dedicado a la venta de mariscos en carreta.
La campechana caliente de Mazatlán es el equivalente a desayunar, después de una noche de fiesta, un menudo, una birria o unos picosos chilaquiles, para cortar el efecto de la borrachera, como algo que surgió así, de la nada, y que poco a poco se popularizó y quedó establecido en el paladar y gusto de los sureños o mazatlecos, como una costumbre.
Y decimos que es polémica porque en el centro y norte de Sinaloa e, incluso, en otros estados, la campechana o el cóctel de camarón se acostumbra frío y en algunos, incluso, le echan refresco sabor naranja, preparados de tomate y hasta salsa kétchup.
Esto al famoso «chino changuirongo» le ha traído algunas peticiones especiales de gente que llega a su carreta, la cual ya convirtió en un pequeño restaurante, porque los comensales, principalmente, de Culiacán y de Los Mochis, le piden que les «enfríe» su campechana antes de servirla.
La campechana toma su nombre por ser un platillo con una combinación de mariscos, entre el camarón, pulpo cocido, almeja u ostión, callo de hacha y caracol, que van servidos con el caldo de camarón caliente, en una copa «chabela» y a la que se le agrega cebolla y pepino, finamente picados.
Ya en la mesa, el comensal es libre de agregarle su toque de limón y de salsas, para hacerlo un tanto picosito y que tenga un mejor efecto anti-crudas.
Este platillo, aunque es muy popular todo el año, en Mazatlán toma mayor fuerza cuando es Carnaval, Semana Santa y en las fiestas decembrinas; el cual puedes encontrar con un precio de entre 200 y 250 pesos, dependiendo el tamaño y el restaurante.
Pero no importa si estás acostumbrado a consumirla fría, después de una buena fiesta en Mazatlán, estamos seguros de que la campechana caliente te «salvará la vida».