¿Por qué el Océano Pacífico y el Océano Atlántico no se mezclan entre sí?
Internacional | 07/12/2023 07:52:00 p. m. | Luz Noticias
El factor principal detrás de esta división se debe a la densidad de los cuerpos de agua, la cual está relacionada con el nivel de salinidad del mar.
Una de las maravillas más intrigantes de la naturaleza es la división visual entre el Océano Atlántico y el Océano Pacífico, un fenómeno que ha sido captado en numerosas fotografías. Sin embargo, pocas veces se conoce la verdadera razón detrás de esta inusual rareza.
Es importante tener en cuenta que, eventualmente, ambos océanos se mezclan, pero el proceso es tan largo que resulta prácticamente imperceptible. Esta es la razón por la cual se puede apreciar una marcada diferencia en el color de las aguas.
¿Por qué ocurre este fenómeno?
El factor principal detrás de esta división se debe a la densidad de los cuerpos de agua, la cual está relacionada con el nivel de salinidad del mar. Es importante recordar que el agua más oscura posee una mayor concentración de sal, mientras que el agua dulce se caracteriza por su tonalidad clara.
Debido a las diferencias en la composición química, el agua dulce y el agua salada permanecen «separadas» durante más tiempo del habitual antes de que ambas sustancias puedan mezclarse entre sí.
Los océanos no logran alcanzar una armonía en la resistencia de la conexión de sus moléculas y en las termoclinas que definen su temperatura.
El agua del Pacífico es más cálida, mientras que la del Atlántico es considerablemente más fría. A pesar de que el agua de ambos océanos se mezcla eventualmente, cada océano conserva su distintiva cantidad de sal, lo que le otorga a cada uno su color único y crea la aparente impresión de que nunca se unen por completo.
¿Qué provoca las diferencias en la salinidad de los océanos?
La salinidad de los océanos varía debido a la erosión química, la evaporación, las corrientes oceánicas y la temperatura. La erosión química aporta minerales y sedimentos con sales desde la superficie terrestre, contribuyendo a la salinidad del agua.
La evaporación incrementa la salinidad al dejar atrás agua menos salada. Las corrientes oceánicas transportan agua con diferentes niveles de salinidad, generando variaciones regionales. La temperatura también influye, ya que el agua caliente se evapora más rápido y puede resultar en áreas de mayor salinidad en regiones tropicales.
Las regiones polares pueden tener una menor salinidad debido al derretimiento de glaciares. La salinidad varía localmente debido a factores geográficos y la interacción con masas de agua continentales.
Este fascinante fenómeno de la división del Océano Atlántico y Pacífico nos recuerda la complejidad y la diversidad de la naturaleza, brindándonos una visión cautivadora de los misterios que aún se esconden en nuestros vastos océanos.