México | 01/13/2024 02:01:00 p. m. | Adriana Ochoa
En la búsqueda de optimizar el consumo de energía eléctrica y mantener la precisión en la facturación, la Comisión Federal de Electricidad (CFE) brinda información crucial sobre el cambio de medidores de luz, un componente esencial para el monitoreo del consumo en los hogares mexicanos.
El wattorímetro, comúnmente conocido como medidor de luz, es el instrumento encargado de registrar y medir el consumo eléctrico en los hogares. Existen dos tipos de medidores utilizados por la CFE:
Aunque no existe un periodo de vida útil predeterminado para los medidores de luz, es esencial que los usuarios estén alerta a posibles fallas o discrepancias en el consumo registrado en sus recibos de luz. Para abordar estas situaciones, la CFE ha establecido un proceso sencillo.
FOTO: Temática.
Solicitar una visita de un trabajador de la CFE para la revisión del wattorímetro es un paso crucial en la resolución de posibles problemas.
Es importante destacar que la revisión por parte de la CFE no tiene ningún costo para el usuario. Sin embargo, en caso de que se detecten fallas en el funcionamiento del medidor, el usuario deberá asumir el costo del cambio de medidor, el cual tiene un precio promedio de 4 mil 500 pesos.
En cuanto al funcionamiento de los nuevos medidores, la CFE cuenta con dos tipos: los analógicos, que operan de manera mecánica y son conocidos como electromecánicos, y los digitales, que utilizan un contador en forma de reloj digital para mostrar las cifras de los kilovatios (kW) consumidos en el hogar.
Los medidores digitales ofrecen la ventaja de proporcionar información detallada sobre el consumo eléctrico por franjas horarias.
Para acceder a esta información y conocer el aproximado a pagar en el recibo de luz de la CFE, los usuarios deben ingresar al menú del medidor digital, lo cual se logra presionando el único botón del equipo hasta que se muestren los dígitos pertinentes.
En resumen, estar atentos a posibles fallas, discrepancias en el consumo y realizar revisiones periódicas son prácticas clave para garantizar un funcionamiento óptimo de los medidores de luz en los hogares mexicanos.
La colaboración entre los usuarios y la CFE contribuye a mantener una transparencia en la facturación y a asegurar la eficiencia en el servicio eléctrico.