México | 02/20/2024 08:42:00 a. m. | Adriana Ochoa
El Ozempic, un fármaco producido por el laboratorio danés Novo Nordisk A/S, ha generado revuelo en México no solo por su eficacia en el tratamiento de la diabetes tipo 2, sino también por su empleo indebido con fines estéticos, lo cual ha levantado preocupaciones entre las autoridades de salud y expertos médicos.
El medicamento, que imita una hormona liberada después de comer para estimular la producción de insulina y reducir los niveles de glucosa en la sangre, ha cobrado popularidad en Estados Unidos, donde personalidades como Elon Musk, CEO de Tesla, han promovido su uso para la pérdida de peso.
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A pesar de las advertencias, el Ozempic está disponible en cadenas farmacéuticas como Farmacias del Ahorro y Farmacias Benavides, en presentaciones de dosis de 0.25 o 0.50 miligramos con aguja inyectable.
Sin embargo, su precio elevado, que oscila entre los 3,984 y 4,021 pesos, lo convierte en un producto inaccesible para muchas personas, lo que ha generado críticas y controversia en torno a su uso.
Ante estas circunstancias, los expertos médicos enfatizan la importancia de utilizar el Ozempic únicamente bajo supervisión médica y para los fines para los que fue diseñado, así como la necesidad de promover hábitos de vida saludables y un enfoque integral en el tratamiento de la diabetes y la pérdida de peso.
En resumen, el Ozempic, si bien ofrece beneficios significativos para el control de la diabetes, su uso inapropiado y su elevado costo plantean desafíos éticos y de salud pública que requieren una atención urgente por parte de las autoridades sanitarias y la sociedad en su conjunto.