México | 03/26/2024 07:55:00 a. m. | Adriana Ochoa
La temporada de Pascua se acerca y Krispy Kreme, la famosa cadena de donas, se une a la celebración con el lanzamiento de su más reciente creación: la dona sabor pastel de zanahoria.
Disponible desde el 25 de marzo hasta el 7 de abril en todas las tiendas y también para pedidos a domicilio, esta nueva delicia promete deleitar los paladares con su exquisito sabor y su suave textura.
Inspirada en la receta tradicional del pastel de zanahoria, la dona de Pascua de Krispy Kreme ofrece una masa suave y esponjosa que seguramente hará «brincar de felicidad» a quienes la prueben.
Esta nueva incorporación se une a otros sabores icónicos de Krispy Kreme, como el glaseado tradicional de fresa y los sabores gourmet como:
FOTO: Krispy Kreme.
Además de disfrutar de estas deliciosas donas, la temporada de Pascua también nos invita a reflexionar sobre el significado de algunos de sus símbolos más representativos.
Los huevos y el conejo de Pascua han sido parte de la tradición de esta festividad durante siglos. El huevo, símbolo de fertilidad y renacimiento desde tiempos ancestrales, representa la resurrección de Jesucristo en el contexto de la Pascua.
El huevo ha sido un símbolo de fertilidad y renacimiento desde tiempos ancestrales. En el contexto de la Pascua, el huevo representa la resurrección de Jesucristo. La cáscara dura del huevo simboliza la tumba de Jesús, mientras que la yema y la clara representan la nueva vida que brota de la muerte.
El conejo también es un símbolo de fertilidad y abundancia. En muchas culturas, se le asocia con la primavera, época de renovación y crecimiento. En la tradición de la Pascua, el conejo se ha convertido en el mensajero que trae los huevos de chocolate a los niños.
Es importante destacar que la asociación de los huevos y el conejo con la Pascua tiene un origen pagano. En muchas culturas precristianas, estos símbolos se utilizaban para celebrar la llegada de la primavera.
Con el tiempo, la Iglesia cristiana adoptó estos símbolos y les dio un nuevo significado dentro de la tradición de la Pascua.