Sinaloa | 05/10/2024 12:30:00 p. m. | Enrique Chan
Juan Carlos Rivera Padilla salió a trabajar de una taquería a pocas calles de su casa en Urbi Villa, en el puerto de Mazatlán, sin embargo, jamás volvió con su madre, Noemi Padilla Aldaz, quien, a casi cinco años, lo sigue buscando.
Noemi comenta que la madrugada del 27 de mayo de 2019, su hijo debió regresar a casa tras salir de trabajar, pero esto no ocurrió, y fue cuando comenzó el calvario para ella y su familia, en una búsqueda que, aunque ha sido cansada, no cederá hasta que dé con su paradero.
Este Día de las Madres, así como los últimos cuatro años anteriores, para Noemí no han sido de fiesta, sino de lucha y de protesta, como versan los cánticos que a pecho abierto gritan las madres de «Tesoros Perdidos, Hasta Encontrarlos» con un nudo en la garganta y lágrimas en los ojos.
Este Día de las Madres, la celebración para ellas es diferente, no es en un restaurante o con una fiesta, sino es abrazando la foto de su hijo o hija desaparecido, y marchando por ser vistos y escuchados por las autoridades, quienes señalan, les dan nula respuesta en los procesos de investigación.
Por ello, este viernes, un grupo de madres, hermanas, hermanos e hijos, inclusive, se reunieron en el Monumento al Pescador o «Los Monos Bichis» para emprender una marcha hacia la Plazuela Zaragoza de Mazatlán.
Con vestimenta roja y un globo blanco, quienes buscan a su familiar desaparecido, marcharon entonando consignas para hacerle saber a los mazatlecos que ellos han perdido una parte de ellos, y que esperan que nadie más pase por lo mismo, pero a la vez, para pedirle a las autoridades respuestas a su búsqueda.