Así lucen los hoteles abandonados en Los Mochis ¿Cuáles y cuántos son?
07/18/2024 03:45:00 p. m.
En la ciudad de Los Mochis, algunos edificios que alguna vez fueron espectaculares hoteles y restaurantes ahora yacen en el abandono. Estos lugares, que en su tiempo fueron íconos de la hospitalidad y la gastronomía, hoy están en ruinas, visitados únicamente por personas en situación de calle, drogadictos y curiosos en busca de experiencias paranormales.
Estos hoteles, que en su apogeo fueron centros de actividad y alegría, cayeron en decadencia debido a una combinación de mala gestión, crisis económicas y fenómenos naturales. Ahora, sus estructuras abandonadas solo sirven como foco de infección, riesgo de accidentes o delitos y hogar para indigentes
El Hotel Posada Real, favorito de muchas familias por su arquitectura colonial y bonitos jardines, era propiedad de Víctor Toledo. Construido a finales de los años 60, funcionó durante 30 años antes de cerrar debido a problemas de administración.
En junio de 2021, el cuerpo sin vida de un hombre fue encontrado en su interior, y en varias ocasiones se ha reportado la quema de su maleza, lo que ha requerido la intervención del equipo de bomberos. Actualmente, el hotel es un destino popular para quienes buscan grabar videos paranormales, intentando «cazar fantasmas» en sus desolados pasillos.
Hotel Catalina
El Hotel Catalina, fundado a principios de los años 70 por Zaky Bacri Muez, de origen libanés, dejó de funcionar alrededor del año 2000.
Este hotel tenía un toque especial, ya que era el lugar donde se hospedaba José Ángel Espinoza Ferrusquilla durante sus visitas a la feria maratónica de Ahome. Hoy, el Hotel Catalina está desierto, sus habitaciones vacías y sus pasillos silenciosos, recordando un pasado lleno de vida y visitantes ilustres.
En el 2022, este hotel fue registrado en búsqueda de Fabiola Vianey, una maestra que fue víctima de feminicidio.
Hotel Colinas
Anteriormente conocido como «Holiday Inn», el Hotel Colinas fue inaugurado en 1981 y era propiedad del exgobernador Alfredo Valdez Montoya y su socio Canuto Ibarra.
Este hotel fue testigo de la peor tragedia aérea en la historia del noroeste de México. El 29 de enero de 1986, un avión DC-3 de Aerocalifornia se estrelló, matando a 18 pasajeros y tres tripulantes. A pesar de esta tragedia, el hotel continuó siendo un lugar donde las personas creaban recuerdos inolvidables con amigos y familiares.
El Hotel Colinas, ahora abandonado, se mantiene erguido como un testigo silencioso de innumerables historias y experiencias compartidas por personas de todas las edades. Sus muros, que alguna vez resonaron con las risas y las voces de los huéspedes, ahora solo escuchan el eco del viento y los pasos de los pocos que se aventuran a explorar sus ruinas.