07/31/2024 06:21:00 a. m.
La repentina muerte del famoso caballo de carreras «El Payaso» causó dolor y conmoción entre los aficionados del tradicional deporte, principalmente por la emotiva historia de superación por la que vivió el caballo.
Todos conocemos a grandes rasgos la historia del «Payaso»; sus dueños en Estados Unidos no lo quisieron, confiaron en él acá en México y se convirtió en una leyenda en el país pero, ¿Sabías que «El Payaso» estuvo a punto de ser sacrificado por tener una enfermedad?
La historia no se remonta particularmente a cuando «El Payaso» iniciaba en el mundo de las carreras, sino más bien a cuando ya era uno de los caballos referentes en el país.
«El Payaso», al no tener rival que le pudiera dar pelea en México durante varios años, provocó que nadie quisiera competir contra él (porque asumían que iban a perder), por lo que «El Payaso» fue trasladado a Estados Unidos para competir allá.
Ya en Estados Unidos, «El Payaso» lamentablemente contrajo una grave enfermedad llamada Piroplasmosis Equina, la cual resulta ser muy frecuente entre caballos.
Al ser esta enfermedad muy contagiosa, en Estados Unidos tienen la orden de sacrificar a cualquier caballo que se contagie con Piroplasmosis Equina y «El Payaso» no iba a ser una excepción.
Afortunadamente para el caballo y el mundo de las carreras, sus dueños lograron «robarse» al payaso y regresarlo para México, en donde no es una obligación sacrificar a un animal por padecer la enfermedad.
Piroplasmosis equina es una enfermedad transmitida por la sangre de los équidos (caballos, burros, mulas y cebras) causadas por uno de dos parásitos protozoarios, Theileria equi y Babesia caballi.
Después del período de incubación (tiempo antes del inicio de los signos clínicos) de 5 a 28 días, los signos clínicos pueden incluir fiebre, anemia, color amarillento de las membranas mucosas (ictericia), orina teñida de rojo o marrón oscura y colapso y muerte en los casos graves