08/13/2024 08:40:00 a. m.
En tiempos donde el ahorro energético es una prioridad, no solo por el impacto ambiental, sino también por el aumento constante en los costos de la energía, es crucial identificar cuáles de nuestros electrodomésticos que consumen electricidad incluso cuando están apagados.
Este fenómeno, conocido como «consumo en espera» o «corriente vampiro», afecta significativamente a la factura de la luz, y hay un aparato que se destaca por encima del resto.
Según un estudio del Ente Provincial de Regulación de Energía de Entre Ríos (EPRE), los electrodomésticos en modo de espera pueden consumir, en promedio, alrededor de 1.6 kilovatios diarios, lo que representa entre el 5% y el 10% del consumo total de energía en un hogar.
Este gasto se produce especialmente durante la noche, cuando la mayoría de los dispositivos están apagados, pero no desconectados.
Estos dispositivos tienen un mecanismo de «stand-by» que los mantiene en un estado de alerta constante, lo que incrementa su consumo energético aun cuando no están en uso.
Un estudio del laboratorio Lawrence Berkeley del Departamento de Energía de EE.UU. destaca que los televisores LCD consumen menos energía en comparación con los modelos de proyección trasera, que pueden llegar a duplicar el consumo de los antiguos televisores de rayos catódicos.
Además de las televisiones, los decodificadores de televisión por cable o satélite también son grandes consumidores de energía en modo de espera. Dentro de esta categoría, los modelos con grabador de video son los que más electricidad consumen cuando están apagados, según el EPRE.
Para mitigar este consumo innecesario, una solución efectiva es el uso de tomacorrientes múltiples que se puedan apagar, desconectando varios aparatos a la vez. También existen tomacorrientes con sensores de presencia, que desactivan automáticamente los dispositivos que no están en uso.
Asimismo, es recomendable conocer la clasificación energética de los electrodomésticos antes de adquirirlos. Los aparatos con una clasificación A+++ son los más eficientes, lo que puede representar un ahorro significativo a largo plazo, tanto en consumo de energía como en la factura de electricidad.
Con estas medidas, es posible reducir la corriente vampiro y contribuir no solo a una reducción de los gastos en el hogar, sino también al cuidado del medio ambiente.