09/02/2024 07:04:00 p. m.
En un movimiento que ha generado controversia a nivel nacional, el gobernador de Oaxaca, Salomón Jara Cruz, ha anunciado su intención de prohibir la transmisión de corridos tumbados, reggaetón y narcocorridos en medios de comunicación y conciertos dentro del estado. Esta propuesta, que apunta directamente a géneros musicales populares entre los jóvenes, busca eliminar lo que el mandatario considera como contenidos sexistas y promotores de la violencia.
Jara Cruz ha explicado que su objetivo es reactivar una iniciativa previa en el Senado que no solo regularía la difusión de estos géneros musicales, sino que también impondría restricciones más amplias sobre cualquier tipo de música que haga apología de la violencia o que promueva agresiones contra las mujeres. Según el gobernador, esta medida es necesaria para proteger la convivencia pacífica y para combatir las expresiones culturales que, en su opinión, perpetúan estereotipos dañinos y conductas violentas.
La propuesta de ley será presentada ante la Cámara de Diputados con la intención de prohibir la difusión de música con lenguaje machista, una medida que, de ser aprobada, marcaría un precedente en la regulación cultural en México.
Como parte de esta cruzada, el gobernador ya ha tomado acciones concretas, ordenando la cancelación de los conciertos de Natanael Cano y Dani Flow, que estaban programados para celebrarse en un estadio de la Universidad Autónoma "Benito Juárez" de Oaxaca (UABJO). El mandatario justificó esta decisión al señalar que las letras de estos artistas son misóginas y denigran a las mujeres, lo cual va en contra de los valores que su administración desea promover.
"No permitiremos que nadie lo haga; he dado instrucciones para que se mantenga una vigilancia rigurosa y evitar la presencia de cantantes o grupos que hagan apología de la violencia contra la mujer", enfatizó Jara Cruz. Además, el gobernador ha declarado que se implementará una vigilancia estricta para evitar la programación de eventos que incluyan a artistas cuyos contenidos puedan ser considerados perjudiciales.
Los corridos tumbados, un subgénero musical que mezcla corridos tradicionales mexicanos con influencias de trap y hip-hop, han ganado popularidad rápidamente, gracias a artistas como Natanael Cano, que con sus letras auténticas sobre la vida en las calles han capturado la atención de una audiencia joven. Por su parte, el reggaetón, con sus raíces en Puerto Rico, ha evolucionado de un sonido underground a un fenómeno global, dominando las listas de éxitos con artistas como Bad Bunny y J Balvin.
Ambos géneros conectan profundamente con sus audiencias al explorar temas sociales y personales, pero han sido criticados por sus letras explícitas y, en algunos casos, por perpetuar estereotipos de género y violencia.
La propuesta de Jara Cruz ha desatado un acalorado debate. Mientras algunos aplauden la medida como un paso necesario para combatir la violencia de género y promover una cultura de respeto, otros la ven como un acto de censura que podría limitar la libertad de expresión y la diversidad cultural.
La discusión apenas comienza, y será la Cámara de Diputados la que decida si esta polémica iniciativa se convierte en ley, lo que podría sentar un precedente significativo en la regulación de contenidos culturales en México. Mientras tanto, los fanáticos de estos géneros musicales observan con preocupación el desarrollo de esta situación, que podría cambiar el panorama musical en Oaxaca y más allá.