10/22/2024 04:21:00 p. m.
Al viajar por carretera en México, es común notar las rampas de frenado a lo largo de ciertas pendientes pronunciadas. Estas franjas auxiliares de seguridad están diseñadas para detener vehículos cuyo sistema de frenos ha fallado. Aunque muchos conductores creen que su uso es gratuito, la realidad es que existen costos asociados que podrían sorprender a más de uno.
Las rampas de frenado son áreas específicas ubicadas en los costados de las autopistas, diseñadas para detener de manera segura a vehículos pesados o ligeros que han perdido el control debido a una falla en los frenos. Estas rampas están construidas con materiales especiales que ayudan a desacelerar el vehículo de forma controlada.
El proceso para usarlas está bien señalizado con líneas rojas discontinuas y continuas en el pavimento, las cuales guían a los conductores hacia la rampa en caso de emergencia. Su uso puede ser la diferencia entre un accidente grave y una detención segura.
A primera vista, el uso de las rampas de frenado no tiene un costo directo, según informa Caminos y Puentes Federales (CAPUFE). Sin embargo, hay "letras chiquitas" que todos los conductores deben conocer. Si bien no se cobra por utilizarlas, los costos derivados del uso de una rampa —como los daños ocasionados al material de la rampa y el reacomodo posterior— sí pueden generar una factura.
Si el vehículo involucrado cuenta con un seguro, será la aseguradora quien cubra estos gastos. En caso de no tener seguro, los conductores enfrentan costos elevados.
Para los vehículos particulares menores a 3.5 toneladas sin seguro, el deducible puede ser de 7,000 pesos, lo cual cubre el reacomodo de los materiales utilizados para detener el vehículo. Sin embargo, para los vehículos mayores a 3.5 toneladas, la historia es diferente: los costos pueden oscilar entre 90,000 y 170,000 pesos, dependiendo de la magnitud del daño causado al momento de usar la rampa. Y esto no incluye el costo del arrastre del vehículo, que debe ser cubierto aparte.
Las rampas de frenado están estratégicamente ubicadas en zonas de pendiente pronunciada, normalmente entre 5 y 7 kilómetros antes de los puntos donde los vehículos sin control pueden representar un riesgo mayor. Estas ubicaciones están pensadas para interceptar a la mayor cantidad posible de vehículos antes de que puedan ocasionar accidentes graves.
Tener seguro vehicular no solo es obligatorio en México, sino que puede ser la diferencia entre pagar una pequeña parte del costo de usar una rampa de frenado o enfrentar una factura de hasta 170,000 pesos. Además, utilizar estas rampas de emergencia no es algo que deba tomarse a la ligera; es un sistema de seguridad diseñado para salvar vidas, pero cuyo uso implica costos que podrían pasar desapercibidos para los conductores desprevenidos.
Así que, la próxima vez que estés en la carretera, asegúrate de estar bien informado y de contar con un seguro que te respalde en caso de necesitar una de estas rampas de emergencia.