Nanosatélite mexicano GXIBA-1 será enviado al espacio en el 2025, ¿qué es y para qué servirá?

Tecnología | 12/19/2024 02:51:00 p. m. | Ingrid Mateos

Este proyecto está impulsado por la Agencia Espacial Mexicana, la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla y la Agencia Espacial Japonesa

México lanzará su segundo nanosatélite en el 2025 desde la Estación Espacial Internacional (EEI), el GXIBA-1. 

Este avance tecnológico es impulsado por la Agencia Espacial Mexicana (AEM) en colaboración con la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP) y la Agencia Espacial Japonesa (JAXA). 

El GXIBA-1 fue seleccionado en 2022 durante la sexta convocatoria del concurso internacional "KiboCUBE", organizado por la JAXA y la Oficina de Asuntos del Espacio Exterior de las Naciones Unidas (UNOOSA), logrando convertirse en el proyecto ganador. 

Solo dos equipos en Latinoamérica han logrado ser seleccionados para este prestigioso concurso, lo que resalta aún más la importancia de este logro para México.

¿Para qué servirá?

El nanosatélite GXIBA-1 forma parte del programa “Monitoreo y Exploración de Volcanes Activos” (MEVA), que tiene como objetivo desarrollar tecnologías avanzadas para monitorear la actividad volcánica, especialmente en el Popocatépetl. 

El satélite incorporará sensores diseñados por científicos mexicanos y utilizará algoritmos de inteligencia artificial como Machine Learning y Deep Learning para analizar patrones en la actividad volcánica. 

Esto permitirá predecir erupciones con mayor precisión, lo que ayudará a proteger a las comunidades vulnerables y fortalecerá la capacidad del país para gestionar desastres naturales.

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¿Cuál fue el primer nanosatélite mexicano?

Este proyecto es una continuación del éxito del AztechSat-1, el primer nanosatélite mexicano lanzado a la EEI en 2019. 

El AztechSat-1 fue reconocido por la NASA como uno de los 20 proyectos más innovadores en la EEI, y marcó un hito importante para México en la exploración espacial. 

La experiencia adquirida con este satélite ha sido fundamental para el desarrollo del GXIBA-1, ya que el equipo de ingenieros y científicos mexicanos que trabajó en el AztechSat-1 ahora colabora en este nuevo proyecto.

Como dato curioso, el nombre GXIBA proviene del zapoteco y significa "Universo" o "Estrellas", simbolizando el potencial del proyecto la tecnología mexicana.