12/20/2024 12:37:00 p. m.
En la caseta de cobro de San Miguel Zapotitlán, al norte de Sinaloa, más de una docena de vendedores han encontrado en la venta de burritos una forma de sustento que no solo alimenta a sus clientes, sino también a sus propias familias.
Estos emprendimientos, algunos con más de 15 años de historia, se ha convertido en un punto emblemático para viajeros que cruzan la carretera.
Macrina Jarquín, originaria de Oaxaca y residente en Sinaloa desde hace 36 años, es una de las pioneras.
Con más de 15 años dedicados a la venta de burritos en este lugar, asegura que, aunque el trabajo es complicado y peligroso debido al tránsito constante de vehículos, ha logrado sacar adelante a su familia gracias a su esfuerzo diario.
"Yo soy de Oaxaca, pero ya tengo 36 años aquí en Sinaloa, ya tengo más de 15 años vendiendo aquí en la caseta y de aquí hemos sacado el sustento para la familia", expresó.
Por su parte, Carlos González, quien lleva cinco años en esta labor, menciona que la venta de burritos es una tradición familiar.
Él, junto a sus seres queridos, aprovecha las temporadas de mayor afluencia en la carretera para ofrecer este alimento a viajeros que buscan una comida rápida y casera.