02/11/2025 08:53:00 p. m.
El Senado de la República aprobó por unanimidad la solicitud de la presidenta Claudia Sheinbaum para permitir la entrada de 10 elementos del Ejército de Estados Unidos a territorio nacional. Su misión será participar en el adiestramiento de las fuerzas especiales de la Secretaría de Marina (Semar) en Campeche.
El programa de capacitación se desarrollará del 17 de febrero al 28 de marzo de 2025 en el Centro de Capacitación y Adiestramiento de Infantería de Marina, ubicado en San Luis Carpizo, Campeche. Se prevé que los militares estadounidenses colaboren en la instrucción de tácticas avanzadas de combate y operaciones especiales.
Durante la sesión en la Cámara Alta, la senadora del Partido Acción Nacional (PAN), Lilly Téllez, respaldó la medida y aseguró que la presencia de las fuerzas estadounidenses no compromete la soberanía del país.
"Vemos que no hay invasión porque vengan fuerzas estadounidenses a cooperar con las mexicanas. No hay ninguna violación a la soberanía, la patria no se vendió ni se sometió".
Sin embargo, Téllez cuestionó por qué no se permite una colaboración más amplia con Estados Unidos para el combate a los cárteles de la droga, argumentando que esta alianza podría salvar vidas.
"Morena ha dejado indefensos a los mexicanos ante la violencia del crimen organizado".
La legisladora panista también criticó la estrategia de seguridad del actual gobierno, señalando que el Estado mexicano no ha logrado frenar el poder de los cárteles, los cuales continúan perpetrando actos de violencia en diversas regiones del país.
Por su parte, el senador del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Rolando Zapata Bello, destacó que esta colaboración con Estados Unidos representa una oportunidad para fortalecer la seguridad nacional.
Aseguró que la propuesta fue analizada cuidadosamente para garantizar el respeto a la soberanía y enfatizó la importancia de que esta cooperación refuerce la capacidad de México para defender su pluralidad y libertad.
La aprobación de este programa de adiestramiento militar marca un nuevo episodio en la relación de seguridad entre México y Estados Unidos. En un contexto donde la lucha contra el crimen organizado sigue siendo un tema de debate en el país, esta colaboración podría influir en la estrategia de seguridad nacional en los próximos meses.