02/25/2025 02:26:00 p. m.
Los productores de cebolla en Sinaloa enfrentan una crisis severa debido al desplome en los precios de su producto pues, en algunas regiones ha caído hasta los cuatro pesos por kilogramo. Esta situación ha dejado a muchos agricultores con pérdidas significativas, ya que el costo de producción supera las ganancias actuales.
El Secretario general de la Coordinación Organizadora de la Unidad Campesina (COUC) en Sinaloa, informó que el problema se debe a varios factores, incluyendo la competencia con otros estados como Guanajuato, que ha incrementado su producción en los últimos años y tiene ventaja por su cercanía con mercados clave como Guadalajara y la Ciudad de México.
Explicó que, debido a la volatilidad de los precios, los productores han comenzado a sembrar cada vez más temprano para aprovechar la mejor venta de comercialización. La fecha óptima de siembra es el 20 de octubre, pero algunos agricultores han adelantado el proceso hasta agosto, a pesar de la falta de agua.
"Los que tienen pozos pueden sembrar antes y cosechar en diciembre o principios de enero, cuando los precios aún son buenos. Pero este año, como no había agua, muchos se tuvieron que esperar, y ahora la cebolla está barata", explicó.
En los primeros meses de la cosecha, algunos lograron vender su producto entre 9 y 10 pesos por kilo, pero actualmente el precio ha caído drásticamente. En la región de Ébora, los compradores están pagando apenas cuatro pesos por kilo, y solo por la calidad premium.
Uno de los problemas más graves es que solo la cebolla mediana-grande está siendo comercializada, mientras que la más grande y la más chica se queda en el campo sin comprador.
"La cebolla de tamaño yúmbo, que es la más grande, la están dejando tirada. También la mediana chica, que es la más comercial en el estado, se está quedando sin vender", lamentó.
Según el líder campesino, para que los productores no perdieran dinero, el precio debería estar por encima de los seis pesos por kilo, pero actualmente solo están logrando vender una parte de su producción y el resto se está malbaratando.