03/03/2025 04:08:00 p. m.
El reciente Mobile World Congress en Barcelona fue testigo de una avalancha de innovaciones tecnológicas, desde los últimos modelos de teléfonos inteligentes hasta tabletas de vanguardia.
Sin embargo, en medio de la multitud de dispositivos tradicionales, un avance verdaderamente disruptivo capturó la atención de los asistentes: la primera computadora biológica de uso comercial, la CL1, desarrollada por la empresa australiana de biotecnología Cortical Labs.
La computación biológica es un campo emergente que fusiona la biología y la informática, busca revolucionar la forma en que procesamos y almacenamos datos. Con dos objetivos principales en mente, esta disciplina se esfuerza por:
En este contexto, la CL1 de Cortical Labs representa un paso revolucionario en la creación de hardware biológico capaz de procesar y almacenar datos de manera completamente nueva.
Conocida también como "La primera computadora biológica desplegable por código del mundo", la principal característica de la CL1 es la implementación de neuronas encapsuladas en un chip de silicio.
Aquí, las neuronas reales se cultivan dentro de una solución rica en nutrientes, suministrándoles todo lo que necesitan para estar sanas. Crecen a través de un chip de silicio, que envía y recibe impulsos eléctricos a la estructura neuronal.
Asimismo, utiliza un Sistema Operativo de Inteligencia Biológica (biOS), que dirige un mundo simulado a través del cual se envía información a las neuronas sobre su entorno. Al reaccionar, sus impulsos afectarán al mundo simulado.
De acuerdo a Cortical Labs, el usuario se conecta directamente con estas neuronas e implementar código directamente sobre ellas. "La neurona es autoprogramada, infinitamente flexible, y el resultado de cuatro mil millones de años de evolución".