03/05/2025 04:31:00 p. m.
El presunto feminicida de una mujer joven trabajadora del campo que fue localizada en descomposición en el Ejido Felipe Ángeles, Ahome, el pasado 21 de febrero; fue vinculado a proceso y quedó en presión preventiva oficiosa, tras la duplicidad del término al que se acogió en la audiencia inicial, el pasado sábado, 1 de marzo.
Se trata de Juan Noé "D", de 19 años de edad, apodado "El Chilango" y/o "El Sonora", presunto feminicida de una mujer en el ejido Felipe Ángeles, Ahome, señalado del delito de feminicidio, delito vinculado a la desaparición de personas con el fin de ocultar un delito, en perjuicio de una mujer joven aún sin identificar a quien conocían como Chayito, presuntamente, identificada como Rosario Urías Maro.
Este miércoles, 5 de marzo, minutos después de las 13:00 horas se llevó acabo la Continuidad de la audiencia inicial, de la causa penal 143/2025, en la sala A de la Sede Regional de Justicia Penal Acusatoria y Oral Norte, en donde el Ministerio Público en representación de la Fiscalía de Sinaloa expuso los datos de prueba recabados por la policía de investigación y reiteró la solicitud de vinculación a proceso.
Entre los datos vertidos en el desahogo de pruebas, se detalló que el pasado lunes, 10 de febrero, alrededor de las 4 de la mañana se encontraba con un grupo de personas junto a una tienda de conveniencia en la comunidad de Felipe Ángeles, esperando un camión para trasladarse a trabajar en un campo agrícola en la pizca de elote. Entre ellas, la víctima, a quien conocían como Chayito.
Se estableció que el ahora imputado se acercó y la invitó a su domicilio para regalarle unos tenis, la cual accedió, pero este presuntamente se encontraba bajo los influjos de las drogas y estando allá intentó forzarla a sostener relaciones sexuales, pero la víctima se negó, lo que ocasionó el enfurecimiento del presunto agresor y en la golpeó y la arrojó el suelo.
Una vez en el piso en la casa del agresor, este presuntamente tomó un palo y la golpeó en repetidas ocasiones en el rostro, hasta tumbarle la dentadura, luego tomó un cinto y la asfixió, aprovechando que ella se en desventaja, sin poder pedir ayuda y en estado de indefensión. Posteriormente, la envolvió en una cobija y la sacó arrastrando de su casa, para llevarla hacia uno de los cuartos de una casa abandonada que se encontraba contiguo a la casa que el rentaba.
Luego cubrió el cuerpo con una cortina de color tinto, y la dejó allí en dónde finalmente fue localizada en avanzado estado de descomposición, con la ropa interior a las rodillas y envuelta en la cobija, el pasado 21 de febrero en el mismo Ejido Felipe Ángeles.
Y es que según en su declaración, el ahora imputado confesó el crimen a los policías y le dijo que se encontraba bajo los influjos de las drogas ya que al usarlas se encontraba en un estado de euforia y lujuria.
Según el examen pericial de necropsia practicado la víctima, se confirmó que la causa de la muerte fue asfixia por estrangulamiento y fracturas por mecanismo contuso; sin embargo, antes mortem presentó golpes contusos.
En los datos de prueba que obran en la carpeta de investigación, se señala que varias personas fueron testigos de cómo la víctima se fue con el presunto agresor, y que después de eso ya no fue vista con vida en el ejido Felipe Ángeles.
Previo a que el juez Francisco Javier Espinosa, diera la resolución del formal a vinculación a proceso, la defensa legal del ahora imputado, pidió la palabra y expresó que su defendido quería tomar la palabra para manifestar su postura, lo cual causó una controversia y alegatos entre los agentes del ministerio público, las asesoras jurídicas victimales y la parte acusada, ya que esta última argumentaba que los datos de prueba que obran en la declaración preparatoria no deberían de tener validez en esta etapa procesal, ya que se tomaron durante una declaración en la agencia de narcomenudeo, tras cumplimentarle la orden de aprensión.
Asimismo, expresó que se debía garantizar en todo momento su derecho a la presunción de inocencia, y que la Fiscalía buscaba la vinculación con la declaración preparatoria; argumentos que el juez desestimó, y aceptó la solicitud por parte de la Fiscalía, pero concedió el derecho al imputado a manifestar su postura sin que fuera tomado como una declaración, ya que en la audiencia inicial se reservó su derecho a declarar.
"yo no quería hablar, la verdad yo no quise hablar y si dije la verdad para que me hicieran libre, por los golpes me hicieron hablar, las amenazas a mi familia", expresó el presunto feminicida.
Lo anterior, también fue desestimado por el juez, pero tomó el dato, señalaron que en la audiencia inicial debía haber declarado para que constara en la carpeta de investigación, así como los datos de prueba. También le hicieron ver por parte del ministerio público que el alegaba tortura psicológica, para evitar la vinculación a proceso.
Aún cuando entre los datos de prueba recabados se encuentran los indicios encontrados en el domicilio, entre ellos las cobijas con sangre en el techo de la casa, el palo con el que golpeo a la joven, y un trapeador con el que limpió la sangre dentro del domicilio en el cual rentaba y donde presuntamente ocurrió el asesinato.
Finalmente, Juan Noe D., fue vinculado a proceso y quedó en prisión preventiva oficiosa dentro del centro de ejecuciones de las consecuencias jurídicas del delito cecjude de Goros II, además el juez Francisco Javier Espinosa Gastelum otorgó a las partes un plazo de tres meses para la investigación complementaria.