03/19/2025 08:15:00 a. m.
La marca Bimbo es una de las marcas 100% mexicanas que ha logrado consolidarse a través de todo el país y de todo el mundo de manera exitosa. Desde sus inicios en el año de 1945, la compañía sabía perfectamente lo que esperaban construir con su industria panificadora.
Una de las cosas que más logró llamar la atención de los mexicanos a través de los años a sido la diversidad de productos que tienen para ofrecer, su buena calidad y la innovación en su fabricación.
En el siglo XX, Juan Servitje fundó la panadería "El Molino", siendo hasta el año 1945 cuando sus hijos la transformaron en Bimbo, esto sería el inicio de este gran imperio. Al inicio sus productos eran tan innovadores que rápidamente llamaron la atención de los mexicanos. Gracias a este precedente nacería Super-pan Bimbo, un producto tan novedoso en México que terminó por utilizarse la denominación de pan Bimbo como sinónimo de pan de caja.
En ese mismo año nació el icónico Osito Bimbo, el cual hizo aún más fácil el trabajo de posicionar la marca, pues poco a poco la población comenzó a reconocer a este personaje.
Las primeras ofertas que Bimbo tuvo para el mercado fue pan blanco, integral y tostado en tamaño grande y chico, y se anunciaron como hechos con harina de maíz, a base de leche y enriquecidos con vitaminas.
Contaban además con su empaque sellado y de celofán transparente le permitía al consumidor observar el estado del producto. Estos factores fueron piezas clave para su rápida aceptación por el mercado mexicano.
Con el crecimiento de la popularidad de los sándwich, las ventas del pan de Bimbo fue en aumento también, extendiéndose poco a poco por toda la república mexicana y llegar incluso a estar en la mira a nivel mundial.
Entre las décadas de 1950 y 1970 se asentaron expansiones comerciales y el surgimiento de nuevas marcas que incrementaron la infraestructura de la empresa con la creación de nuevas fábricas de producción.
Con el pasar de los años, Bimbo fue convirtiéndose en un emporio comercial que logró absorber a sus competidores y estructurar nuevas empresas dedicadas a otro giro mercantil, pero siempre bajo el nombre de la marca fundadora, logrando poco a poco posicionarse como la marca panificadora más grande del mundo.