03/20/2025 11:01:00 a. m.
El conflicto legal por los terrenos del extinto Ingenio Azucarero de Los Mochis continúa dividiendo opiniones entre los extrabajadores.
Mientras un grupo de empleados de confianza y sindicalizados que estaban en activo cuando cerró la fábrica insiste en que el litigio sigue en curso y que no se ha concretado la adjudicación de los predios, otro grupo, conformado en su mayoría por jubilados.
Afirma que ya obtuvieron la posesión legal de los terrenos y que pronto recibirán el pago de sus liquidaciones.
Más de 500 extrabajadores que estaban en activo al momento del cierre del ingenio denuncian que el problema sigue sin resolverse y que la adjudicación de los terrenos aún está en disputa.
Acusan a exlíderes sindicales de realizar ventas irregulares de maquinaria y terrenos, además de la falta de transparencia en el uso de los recursos obtenidos.
Señalan que el Registro Público de la Propiedad canceló una escritura que daba la titularidad de los terrenos a un grupo de trabajadores debido a irregularidades en el proceso. Según el abogado Oscar Kelly, los empleados de confianza tienen prioridad en la liquidación de bienes, ya que su embargo fue registrado antes que el de otros trabajadores.
"Se tiene que cumplir con un fallo protector que está en el Juzgado Séptimo, el amparo 102, que no se ha cumplido. Hay una sentencia que debe resolverse y se debe reconocer el derecho de los empleados de confianza", explicó.
Además, advirtieron que cualquier intento de venta de los terrenos sin la autorización del secretario general del sindicato nacional, Lorenzo Pález, sería ilegal.
Por otro lado, un grupo de trabajadores jubilados asegura que, tras 11 años de batalla legal, finalmente lograron la posesión de tres terrenos, cuyo valor estimado es de 395 millones de pesos.
Según ellos, la venta de estos predios permitirá liquidar los adeudos pendientes con los extrabajadores y sus familias.
El abogado Julio César López Quiñones explicó que la empresa había obtenido una suspensión definitiva en el litigio sin garantizar daños a terceros, lo que les permitió solicitar la revocación de la medida y recuperar ventaja legal.
"La empresa no garantizó daños, nos dimos cuenta y le dijimos al juez que dejara sin efecto la suspensión. Así fue. Luego, la Junta tomó conocimiento y ejecutó el acto, dándonos posesión de los terrenos. Hoy tenemos escrituras registradas a nombre de los trabajadores", afirmó.
Alfonso Valdéz, representante de los extrabajadores jubilados, detalló que hay 550 beneficiarios, aunque unos 200 han fallecido, por lo que sus viudas podrán reclamar el pago correspondiente.
Desde tempranas horas, los extrabajadores, muchos de ellos de entre 70 y 80 años, comenzaron a cercar los terrenos y a organizar su venta, asegurando que ya tienen compradores interesados.
"Ellos mismos están haciendo los hoyos porque están felices de ver que, después de tantos años, finalmente se les hace justicia", comentó un líder de los trabajadores.
Los representantes viajarán próximamente a la Ciudad de México para concretar los detalles de la venta y el reparto de los recursos, esperando que el proceso concluya lo antes posible, ya que el tiempo es un factor clave para muchos de los beneficiarios.
"Lo que debió haber hecho la empresa hace 11 años, lo vamos a hacer nosotros ahora. No les cambiará la vida, pero al menos recibirán lo que por derecho les corresponde", afirmó López Quiñones.
Mientras un grupo de trabajadores jubilados celebra la obtención de los terrenos y se prepara para venderlos, los empleados de confianza y sindicalizados que estaban en activo al cierre de la fábrica aseguran que el litigio continúa y que la venta no puede concretarse sin cumplir con los procesos legales pendientes.