12/16/2025 12:03:00 a. m.
El 16 de diciembre la Iglesia celebra a grandes figuras de la historia de la religión, desde San David, Rey y Profeta, de cuya estirpe nace Jesús, hasta Santa Adelaida, la Emperatriz del Sacro Imperio Romano Germánico, famosa por su gran piedad.
San David es una de las figuras bíblicas más grandes, ya que de su estirpe nacería Jesús. Dios lo eligió como rey de Israel cuando aún era el más pequeño de los hijos de Jesé y pastoreaba las ovejas.
David es la figura que establece a Jerusalén como la capital religiosa y política de Israel. El término "Casa de David" se usa para referirse al linaje real, un linaje que culmina con la llegada del Mesías, Jesús, quien es aclamado como "Hijo de David".
Santa Adelaida fue una de las mujeres más influyentes del siglo X. Tras casarse con Otón el Grande, se convirtió en Emperatriz del Sacro Imperio Romano Germánico.
Después de la muerte de su esposo y su hijo, actuó como regente de su joven nieto Otón III, demostrando una notable habilidad política.
Pese a su poder imperial, estuvo atenta a los más pobres y utilizó su vasta fortuna para construir iglesias y fundar monasterios.
Se retiró a un convento benedictino, donde pasó sus últimos años dedicada a la oración y las obras de piedad.
El Beato Sebastián de Aparicio fue un laico franciscano español que emigró a la Nueva España (México).
Se le recuerda como un pionero que dedicó gran parte de su vida a construir y mejorar caminos, facilitando enormemente el transporte y la comunicación en el Virreinato.
Por su labor incansable en las rutas, es invocado como el Patrono de los transportistas, camioneros y viajeros.