Marco Verde: "Me dije a mí mismo que le iba a regalar una medalla a mi padre"

Marco Verde abandonó el ring entre lágrimas tras asegurar, por lo menos, la medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de París 2024. El joven pugilista de Mazatlán, Sinaloa, superó la presión de ser el boxeador mexicano con más posibilidades de conseguir una medalla de los cuatro que participaron en la justa olímpica, al vencer a Nishant Dev de la India con una puntuación de 4-1 en la categoría de 71 kilogramos.

PODRÍA INTERESARTE: Padre de Marco Verde también representó a México en los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992

Un Combate de Alta Tensión

El combate no fue sencillo para Verde, quien perdió el primer round, pero logró reponerse en los siguientes dos episodios para salir con el brazo en alto. "Era una presión muy grande. Creo que ver a mis compañeros que no pudieron avanzar fue difícil porque yo estuve con ellos seis meses y me dolió también verlos que se quedaron en el camino, pero esta medalla es para ellos", expresó Marco con voz entrecortada.

Promesa Cumplida

Con lágrimas en los ojos, Marco Verde compartió la importancia de este triunfo: "Cumplimos con todo el trabajo que fue duro y prometí lo que todos los días me dije a mí mismo: que le iba a regalar una medalla a mi padre, a mi abuela, a mi familia y también a mi entrenador, que también se sacrificó".

Reflexión y Mejora

Verde reconoció que cometió errores durante la pelea y prometió mejorar para la semifinal. "Mi entrenador me dio un coscorrón porque perdimos el primer round. Creo que estaba haciendo mal las cosas, hasta yo me sentí muy ansioso por querer presionar. Pero mi entrenador en la esquina me acomodó las ideas y pudimos salir bien", comentó.

El joven boxeador también reflexionó sobre los sacrificios realizados: "Han sido meses difíciles, tanto yo como mi entrenador nos tuvimos que ir de casa. Algo que nunca habíamos hecho, esta vez nos tuvimos que ir seis meses. Creo que eso fue lo más duro, irme de casa tanto tiempo, estar acostumbrado a entrenar en mi gimnasio. Y pues ya salir fuera de casa, salir de mi zona de confort, es algo complicado".

Próximo Desafío: Lewis Richardson

Marco Verde ahora piensa en su próximo rival en las semifinales, el británico Lewis Richardson. "Es muy duro. Lo vimos un poco, sabemos que no hay rivales fáciles. Para mí, todas son como una final", afirmó Verde.

Independientemente del resultado ante Richardson, el sinaloense ya ha asegurado la medalla de bronce, pero una victoria le permitiría pelear por la medalla de oro, un logro que no se ha visto en el boxeo mexicano desde Héctor López en Los Ángeles 1984.

Un Legado Familiar

El éxito de Marco Verde también es una extensión del legado de su padre, Manuel "Sammy" Verde, quien representó a México en los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992. Marco ha prometido hacer honor a ese legado y ha demostrado con su reciente victoria que está en camino de hacerlo.

Con su determinación y esfuerzo, Marco Verde continúa haciendo historia en el boxeo olímpico, llevando consigo no solo el orgullo de su familia, sino también el de todo México.