México
Esta comida era considerada una plaga y hasta era alimento para cerdos; hoy es un lujo comerla
Lo que alguna vez fue una plaga indeseada, hoy es uno de los platos más codiciados en la gastronomía internacional.
FOTO: La langosta.
Hoy en día, la langosta es sinónimo de lujo y sofisticación en los menús de alta cocina, pero este crustáceo no siempre gozó de tal prestigio. Hace algunos siglos, en las costas de América del Norte, la langosta era vista como una plaga indeseada y, en el mejor de los casos, un alimento para ganado y esclavos. La increíble transformación de este marisco de ser despreciado a convertirse en un símbolo de exclusividad es una historia que pocos conocen.
- PODRÍA INTERESARTE: En estos restaurantes de El Fuerte se come la mejor birria de la región ¿Cuáles son y cómo llegar?
De Plaga a Alimento para Cerdos
Durante los siglos XVII y XVIII, la langosta era tan abundante en las playas de América del Norte que se consideraba una molestia para los pescadores y los habitantes costeros. Llegaban a las playas en cantidades alarmantes, lo que dificultaba la captura de otras especies de mayor valor y utilidad. Este exceso hizo que las langostas fueran relegadas a tareas poco nobles: se utilizaban como abono para los campos o como alimento para esclavos y animales domésticos, como los cerdos.
De hecho, la clase trabajadora de la época estaba tan cansada de comer langosta que, según informes de la BBC, exigían contratos que limitaban su consumo a no más de tres veces por semana. La langosta, lejos de ser un manjar, era vista como un símbolo de pobreza y escasez.
El Renacimiento de la Langosta: El Poder del Marketing
El giro en la historia de la langosta llegó con la invención de los alimentos enlatados y el desarrollo de las vías ferroviarias. Los pescadores, buscando una forma de deshacerse del exceso de langosta, empezaron a enlatar el crustáceo y lo vendieron a mercados más lejanos. Los maquinistas y vendedores de la época, con un talento natural para el marketing, supieron cómo convertir el despreciado alimento en un manjar deseado.
Convencieron a los turistas de clase alta que visitaban las costas que la langosta era una delicia exótica, y los restaurantes comenzaron a incluirla en sus menús como una experiencia gastronómica única. De esta manera, la langosta fue cambiando su imagen y poco a poco se alejó de su pasado como alimento para los más pobres.
Un Lujo en la Alta Cocina
Con el paso del tiempo, el aumento de la demanda y la sobrepesca hicieron que las poblaciones de langosta disminuyeran, lo que elevó su precio considerablemente. Este cambio no solo transformó su valor económico, sino que posicionó a la langosta como un plato exclusivo, reservado para aquellos con los medios para pagar por este manjar.
Hoy en día, la langosta es apreciada en todo el mundo, y su precio varía dependiendo de la especie y la temporada. En México, el costo de un plato de langosta puede superar los mil pesos en restaurantes de alta categoría, mientras que recetas más sencillas que la incluyen como ingrediente pueden rondar los 500 pesos.
Te puede interesar:
MÁS NOTICIAS DE México
