Agro
Claudia Sheinbaum busca blindar al maíz mexicano con reforma constitucional
Está reforma prohíbe constitucionalmente la siembra de maíz genéticamente modificado en al República mexicana.
FOTO: Luz Noticias.
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, anunció que envió al Congreso de la Unión una iniciativa de reforma a los artículos 4 y 27 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, con el propósito de proteger al maíz mexicano.
La propuesta incluye la prohibición de la siembra de maíz transgénico y el impulso de técnicas agroecológicas que preserven su pureza y diversidad genética.
"Fue enviado al Congreso de la Unión la reforma constitucional para la protección de nuestro maíz. Es una reforma para el artículo 4 y el artículo 27 constitucional, que establecen al maíz como un elemento de la identidad nacional. Al mismo tiempo, se prohíbe que se siembre en nuestro país maíz transgénico y se procura que sea cultivado a través de técnicas agroecológicas, es decir, libre de transgénicos", explicó.
Razas:
Destacó que el maíz, con sus 59 razas identificadas hasta ahora, representa un pilar fundamental de la identidad cultural y alimentaria de México. Este grano, que tiene su origen en Mesoamérica gracias a la domesticación del teocintle, no solo es un sustento básico para los mexicanos, sino también para muchas personas alrededor del mundo.
"Este maíz, con su enorme diversidad genética, es parte de nuestra cultura y biodiversidad. Lo estamos protegiendo porque, sin maíz, no hay país", señaló.
La presidenta enfatizó la importancia de preservar el maíz como patrimonio nacional frente a las amenazas que representan las semillas transgénicas. Según Sheinbaum, su administración busca garantizar que las generaciones futuras puedan seguir disfrutando de este recurso en su estado más natural y vinculado a las tradiciones del país.
La iniciativa ahora queda en manos del Congreso de la Unión, donde se debatirá su aprobación.
En diciembre pasado el informe final del grupo conformado por tres especialistas del T-MEC concluyó que las medidas implementadas por México para prohibir la importación de maíz genéticamente modificado no cumplen con los estándares internacionales y científicos requeridos por el tratado.
El Gobierno mexicano prometió acatarla resolución, resultado de una controversia que inició Estados Unidos y a la que se sumó Canadá, al impugnar dos aspectos del decreto mexicano sobre la restricción del glifosato y maíz transgénico de 2023.
México perdió al controversia, por las medidas que prohíben el uso de maíz transgénico para consumo humano, medidas que supuestamente no se basan en una evaluación de riesgos adecuada ni en la evidencia científica necesaria, lo que constituye una violación de los principios del T-MEC.
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