Sinaloa | Sur
Mazatlán, vulnerable ante un nuevo "Olivia": advierte especialista
Directora de Conserva Costas y Comunidades, Sandra Guido, advirtió que el puerto no está preparado para un desastre similar.
A cincuenta años del paso del huracán Olivia, la tragedia que marcó al puerto en 1975 podría repetirse en pleno 2025, advirtió la directora de Conserva Costas y Comunidades, Sandra Guido, durante su conferencia "Presentador de exploración de vulnerabilidad para Mazatlán".
"Cuando ustedes platican con los especialistas se dan cuenta que lo de antes, el mar, ya no se comporta como antes; están desquiciados los patrones climáticos, las corrientes, lo que antes decíamos, cada 10 años ocurre el fenómeno de 'El Niño', pues no ya todo está cambiando y hemos llegado a temperaturas en el mar que nunca se habían tenido en la historia del planeta", explicó.
El huracán Olivia, de categoría 3, golpeó con fuerza las costas del sur de Sinaloa en el año de 1975, dejando un saldo devastador, con más de 30 mil personas evacuadas, alrededor de 7 mil viviendas destruidas en Mazatlán y en 14 localidades cercanas, 30 personas fallecidas y al menos 500 heridas.
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Además, fenómeno meteorológico provocó enormes pérdidas materiales, incluyendo el hundimiento de la flota camaronera, avionetas y helicópteros dañados en el aeropuerto, la interrupción total del servicio eléctrico, la destrucción del techo del cine Ángela Peralta, caída de luminarias y vagones de tren que fueron arrastrados al mar.
Mazatlán: puntos más vulnerables ante un huracán
De acuerdo con el Estudio de Vulnerabilidad Socioambiental de Mazatlán, elaborado por la consultora PARES: Personas y Paisajes Resilientes A.C., en coordinación con Conserva Costas y Comunidades y el IMPLAN Mazatlán, las zonas con mayor vulnerabilidad socioambiental se concentran en:
Áreas próximas a los esteros del Infiernillo y de Urías, la zona centro cercana al canal de navegación y la desembocadura del río Jabalines, la franja costera turística, y los márgenes del río Jabalines.
Soluciones basadas en la naturaleza
Ante este panorama, Sandra Guido destacó que existen alternativas costo-efectivas que podrían reducir los riesgos y daños futuros mediante soluciones basadas en la naturaleza, entre las que se incluyen:
Pavimentos permeables, más áreas verdes y techos verdes, jardines de lluvia, y sistemas de captación de agua de lluvia (SCALL).
La directora de Conserva Costas enfatizó la urgencia de actualizar las políticas públicas locales, especialmente el reglamento de construcción, para que estas soluciones sean obligatorias en zonas de alta vulnerabilidad.
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