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"Symphony of the Seas", el crucero más grande del mundo: ¿Cuántos pasajeros puede llevar?
Entre sus cifras más impresionantes, el barco es capaz de servir hasta 30,000 comidas al día, gracias al trabajo coordinado de alrededor de 1,000 empleados.
El Symphony of the Seas, perteneciente a la naviera Royal Caribbean International, se mantiene como el crucero más grande del mundo, no solo por sus dimensiones imponentes, sino también por la complejidad logística que implica su operación diaria.
Con capacidad para albergar a cerca de 7,000 pasajeros y una tripulación aproximada de 2,200 personas, esta monumental embarcación es considerada una auténtica "ciudad flotante".
Entre sus cifras más impresionantes, el barco es capaz de servir hasta 30,000 comidas al día, gracias al trabajo coordinado de alrededor de 1,000 empleados dedicados exclusivamente a las áreas de cocina y servicio, lo que exige una operación que muchos describen como "de precisión militar".
Dimensiones colosales
Con más de 360 metros de eslora, 47 metros de manga y un tonelaje que alcanza los 228,081 GT, el Symphony of the Seas destaca por ser, hasta hoy, el buque de pasajeros más grande construido. Su sistema de propulsión está compuesto por seis motores diésel MAN-B&W, capaces de generar 76,000 caballos de fuerza.
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Alojamiento y entretenimiento sin precedentes
- El crucero cuenta con 2,759 camarotes, entre ellos suites de lujo, habitaciones con balcón, vistas al mar y más de 500 camarotes interiores.
- Para los pasajeros, su oferta gastronómica contempla 20 restaurantes, además de bares temáticos y cafés.
A bordo, la variedad de actividades es tan amplia como la de un resort de clase mundial: piscinas, teatro, casino, spa, cancha de baloncesto, pista de patinaje sobre hielo e incluso un jardín botánico forman parte de los espacios que distinguen al navío.
Construcción y debut
El Symphony of the Seas fue botado por primera vez el 23 de marzo de 2018, aunque su viaje inaugural se realizó semanas más tarde, el 7 de abril del mismo año.
Su construcción estuvo a cargo de la misma compañía que desarrolló el Icon of the Seas, el primer crucero con tecnología de pila de combustible y propulsado por gas natural licuado (NGL).
- La embarcación requirió una inversión superior a los 2,000 millones de dólares (aproximadamente 1,815 millones de euros), convirtiéndose en uno de los proyectos más ambiciosos de Royal Caribbean.
Con su llegada, la compañía marcó un precedente en ingeniería naval y en estándares de sostenibilidad dentro de la industria, rumbo a una flota cada vez más eficiente y menos contaminante.
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