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LMP: Jaguares empata la serie; Jared Wetherbee, primer lanzador con 6 triunfos

El duelo de ceros se quebró temprano, cuando en la tercera entrada Nayarit armó un rally de cuatro carreras.

FOTO: Cortesía/LMP.
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Con una salida de absoluto dominio, Jared Wetherbee lanzó seis entradas en blanco para convertirse en pitcher ganador de seis juegos en la Liga ARCO Mexicana del Pacífico esta temporada, los Jaguares de Nayarit derrotaron 6-3 a los Tomateros de Culiacán, igualando la serie y enviando un mensaje claro sobre el momento que vive su rotación.

El duelo de ceros se quebró temprano, cuando en la tercera entrada Nayarit armó un rally de cuatro carreras que exhibió tanto la agresividad felina como los desajustes defensivos guindas. Con uno fuera y hombres en las esquinas, Francisco Acuña se fue al robo de la intermedia y el tiro desviado de Aí Solís abrió la puerta para que Carlos Sepúlveda timbrara la primera. Ricardo Valenzuela añadió la segunda con sencillo al central, Jesse Castillo amplió con hit al derecho en los spikes de Jacob Rhinesmith, y Niko Vásquez cerró el ataque con elevado de sacrificio que mandó a Valenzuela al plato para el 4-0.

Ese inning retrató la tónica del juego: Jaguares presionando, tomando bases, poniendo la pelota en juego y obligando a Culiacán a responder bajo estrés, algo que los locales no lograron hacer. En el sexto rollo, Manny Barreda volvió a meterse en problemas al llenar las bases y salir del juego; el relevo de Fernando Olguín tampoco pudo contener el daño y terminó otorgando pasaporte a Acuña para que Aarón Zavala anotara de caballito. El 6-0 cayó en la séptima, con doblete productor de Carlos Sepúlveda impulsando a Brandon Villarreal, una prueba más del bateo situacional que caracterizó a los visitantes.

Tomateros apenas reaccionó en la novena, ya ante un Garabitos que entró con ventaja amplia pero sin comando. Joey Meneses pegó sencillo, Jon Singleton recibió pasaporte y, tras dos outs, Luis Verdugo detonó un cuadrangular de tres carreras que evitó la blanqueada pero no cambió el destino del encuentro. Fue un estallido tardío que contrastó con la falta de ofensiva que Culiacán arrastró todo el juego. Nunca un juego se parece a otro.

Wetherbee (6-2) terminó con una labor impecable de dos hits, tres bases por bolas y cinco ponches, respaldado por un bullpen que sostuvo la ventaja sin titubeos. Del lado guinda, Barreda (2-3) dejó números de 5.2 entradas, seis hits, cinco carreras, cinco bases y cinco ponches, incluyendo el número 500 de su carrera en la LMP, aunque la falta de control volvió a ser un factor que complicó su salida.

Con el triunfo, Jaguares no solo empata la serie, sino que reafirma su tendencia ascendente, apoyada en un pitcheo que impone ritmo y un lineup que produce cuando hay corredores en posición de anotar. Tomateros, en cambio, mostró inestabilidad desde la loma y poco bateo oportuno, una combinación que los ha perseguido y que deberán ajustar si quieren evitar que la serie se les complique en casa.

Este miércoles, Nayarit enviará a la loma a Omar Sainz en su primera apertura del año, mientras que Culiacán confiará en la experiencia de Luis Cessa para intentar recuperar el control de la serie.

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