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¿El SAT revisa tus movimientos de depósitos bancarios?, esto sabemos
¿El SAT revisa tus depósitos? Te explicamos sobre la vigilancia fiscal y el límite de $15,000 pesos en efectivo que obliga a los bancos a reportar cada mes
¿El SAT está viendo cada depósito que me hacen? Es la pregunta que todo mexicano con una cuenta de banco se hace ante el miedo latente de que Hacienda "te caiga". La respuesta corta y directa es que no, el SAT no está "espiando" tu cuenta diariamente.
Sin embargo, la ley sí establece parámetros muy claros, especialmente sobre los depósitos en efectivo, que obligan a los bancos a reportar cierta información. Aquí te explicamos lo que realmente le interesa al Servicio de Administración Tributaria (SAT) sobre tus movimientos bancarios y cómo puedes protegerte de una revisión por discrepancia fiscal.
¿El SAT te espía?
El SAT no "espía" tus cuentas, pero sí recibe información obligatoria de los bancos, ya que las instituciones están obligadas a reportar al SAT todos los depósitos en efectivo que superen los $15,000 pesos mensuales por cuenta.
De acuerdo con la Resolución Miscelánea Fiscal, los bancos envían esta información (la Declaración Mensual de Depósitos en Efectivo) a más tardar el día 10 de cada mes.
El reporte incluye depósitos en ventanilla, depósitos en cajeros automáticos y cheques de caja abonados a cuentas de personas físicas.
El fisco utiliza esta información como un indicio para iniciar una revisión por discrepancia fiscal si tus movimientos no coinciden con los ingresos que declaraste.
¿Qué movimientos NO están bajo este esquema de vigilancia mensual?
Este es el punto más importante para desmentir el mito:
- Transferencias Electrónicas (SPEI o TEF): Los traspasos y pagos electrónicos no se clasifican como depósitos en efectivo. Por lo tanto, no forman parte del reporte mensual obligatorio, incluso si superan los $15,000 pesos.
- Cuentas Propias: Los movimientos o transferencias que realizas entre tus propias cuentas bancarias no se consideran ingresos y no activan la alerta del SAT.
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Cómo evitar una revisión por discrepancia fiscal
Para prevenir problemas con Hacienda, la clave es la justificación y la transparencia. Los especialistas recomiendan:
Documentar el Origen: Todo ingreso (grande o pequeño) debe tener un comprobante que justifique su origen (factura, contrato de arrendamiento, pagaré por préstamo, o comprobante de venta).
Alinea tus Ingresos: Asegúrate de que los ingresos reales que manejas en tus cuentas bancarias concuerden con las declaraciones anuales que presentas al SAT.
Prioriza lo Electrónico: Siempre que sea posible, evita el uso de grandes sumas de efectivo para operaciones. Opta por transferencias electrónicas para dejar un rastro claro y documentado de tus transacciones.
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